Los fiscales que investigan el crimen de la adolescente solicitaron ampliar la declaración de Jorge Mangeri para agregar los cargos de "femicidio" y la figura de homicidio "agravado criminis causae".
Los fiscales que investigan el crimen de la adolescente Angeles Rawson pidieron hoy ampliar la declaración indagatoria del acusado Jorge Mangeri para agregar los cargos de "femicidio" (cuando la víctima es una mujer y mediare violencia de género) y la figura de homicidio "agravado criminis causae" (cuando se mata para ocultar otro delito, en este caso el ataque sexual). El pedido se hizo ante el juez en lo criminal Javier Ríos, quien deberá resolver si llama al encargado a una nueva indagatoria para notificarle las nuevas pruebas y acusaciones en su contra, informaron fuentes judiciales a la agencia Télam.
La semana pasada Junta Médica confirmó que existió un ataque sexual sin penetración tras haber corroborado lesiones genitales y paragenitales. En una pericia preliminar, la primera Junta Médica había dictaminado que Ángeles (16) “murió sofocada y estrangulada por su asesino en una maniobra que no duró más de cinco minutos y antes de que su cuerpo ingresara a la compactadora de basura”. Los estudios histopatológicos -que analizan los tejidos microscópicamente- fueron consensuados por los diez especialistas del Cuerpo Médico Forense que integraron la segunda Junta Médica de la causa. Los profesionales habían extraído de Ángeles 55 muestras de tejidos y huesos luego de la exhumación de su cuerpo.
El cuerpo de Ángeles Rawson apareció en un basural de la CEAMSE, en José León Suárez, el 11 de junio. Había desaparecido un día antes. Dos días después fue detenido Mangeri, el encargado del edificio de Ravignani 2360, en el que Ángeles vivía junto a su familia. En su procesamiento, el juez Ríos consideró que Ángeles “intentó defenderse a partir de lo cual quedaron rastros genéticos debajo de las uñas” de los dedos índice, anular y mayor de su mano derecha. “Una de sus últimas acciones en vida fue la de defenderse contrayendo su dedo y manos con el fin de arañar a su agresor”, dijo.