El secretario de Seguridad de la Nación dijo que Carlos Alberto Gutiérrez Camacho, el colombiano asesinado en los bosques de Palermo, "tendría conexiones con organizaciones importantes de Colombia". "Es un ajuste de cuentas de tinte mafioso", agregó el funcionario. La fiscal espera confirmar oficialmente la identidad.
El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, confirmó hoy que Carlos Alberto Gutiérrez Camacho, el colombiano asesinado el lunes en los bosques de Palermo, "tiene antecedentes en su país" y que la justicia argentina investiga sus vínculos con el narcotráfico. "El este caso se está investigando. Hay información confidencial de que tendría conexiones con organizaciones importantes de Colombia", dijo Berni en una conferencia de prensa en la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal, donde se desbarató una banda que traficaba cocaína en esquíes.
El funcionario afirmó que Gutiérrez Camacho "tiene antecedentes en su país de tener vínculos con el lavado de activos", aunque aclaró en todo momento que "la Justicia todavía está investigando". Berni aseguró que por ahora no pueden confirmar ni descartar que el crimen "tenga alguna relación con el narcotráfico", pero dijo que están seguros de que "es un ajuste de cuentas de tinte bien mafioso".
"Sabían que en el lugar del hecho no había cámaras. Estamos rastreando todas las cámaras que pueden haber marcado el recorrido anterior desde el momento en el que (las víctimas) se trasladaron de Vicente López hasta el lugar del hecho para poder observar y poder identificar a la tercera persona que se había reunido con la pareja de colombianos", comentó Berni.
"Las causas las podremos determinar cundo la fiscal y el juez den por concluida la investigación. Mientras tanto, es apresurado poder aventurarnos a dar determinadas conexiones que si bien existen hay que confirmarlas", concluyó.
Gutiérrez Camacho había ingresado por primera vez al país en 1997. El lunes a la tarde, en Figueroa Alcorta y Dorrego, dos hombres le gatillaron desde una moto. En total fueron once disparos con una pistola de caño largo calibre .380. Él murió en el acto luego de recibir tres disparos. Su novia, Solange Kive Trujillo Velázquez, de 22 años, fue herida en la pierna y en el torso. Una tercera persona que estaba con ellos huyó resultó ilesa y huyó después del ataque. Se trataría de un hombre, de nacionalidad colombiana, apodado “El Diablo”. Para la Justicia, sería el “entregador” de Gutiérrez Camacho.
El caso es investigado por la fiscal Cristina Caamaño y detectives de la División Homicidios de la Policía Federal que sospechan que se trató de un ajuste de cuentas y sospechan que el tercer hombre -que aún no se presentó a las autoridades-, pudo ser el entregador.
Análisis dactiloscópico
Caamaño aguarda el resultado del análisis dactiloscópico que está realizando la policía colombiana para confirmar la identidad de la víctima. Esos informes deberán confirmar si la víctima es la misma persona que fue condenada en el país cafetero a cuatro años de prisión junto a un jefe policial por el delito de “concierto para delinquir”, el equivalente al tipo penal de asociación ilícita en nuestro país.
“Todavía no hay pruebas que garanticen que Carlos Gutiérrez Camacho sea efectivamente la persona a la que, en distintos medios de comunicación, se le adjudicó la calidad de ‘sicario’”, expresó la Fiscalía de Instrucción en lo Criminal de Distrito Saavedra-Nuñez, a cargo de Caamaño, en un comunicado publicado en Fiscales.gob.ar.
Según el comunicado, la República de Colombia aún no garantizó que la víctima sea el mismo Carlos Alberto Gutiérrez Camacho que fue detenido en 2008 junto al ex jefe de policía Franklin Alexander Pulido Chacón. Ambos fueron condenados por un juzgado penal de Barranquilla al año siguiente. Gutiérrez Camacho fue beneficiado con la prisión domiciliaria en mayo de 2010 y un año y cuatro meses después el juez le concedió la libertad condicional. Finalmente, en mayo de 2013 cumplió su condena.
Sobre los antecedentes penales de la víctima, la fiscalía explicó que “Interpol destacó que Gutiérrez Camacho no tenía ninguna orden de captura vigente”. “El 6 de marzo del 2000, el hombre había sido condenado por la justicia de su país a doce meses de cárcel por portación ilegal de armas. Causa que prescribió el 23 de noviembre de 2005”, indicó.
Desde la fiscalía agregaron que “se está trabajando con las delegaciones de Bogotá y Buenos Aires de Interpol para esclarecer todo lo vinculado con el hecho, su posible victimario y las causas”.