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Ramiro tenía tres años cuando se fue llorando del consultorio de la clínicaSoles de San Isidro el 31 de octubre de 2013.Hoy el Tribunal Oral Criminal 3 de San Isidro condenó al kinesiólogo Pablo Rubén Torres a 7 años y medio de prisión y 5 de inhabilitación para ejercer por “abuso sexual agravado con acceso carnal”. La querella había pedido 19 años de cárcel y el fiscal José Ignacio Amallo,16. La familia repudió la decisión de los jueces Marcelo García Helguera, Verónica Di Tomasso y Raúl Luchelli Ramos.

“Estamos indignados y sorprendidos. No entendemos por qué fallaron así, en el juicio quedó comprobado que él fue el abusador. Vamos a apelar porque quiero mirar a los ojos a Rami y decirle: hice todo”, dijo a Infojus Noticas, Diego Hernández, padre del nene. Esta mañana estaban citados a las 10. Después de una espera de tres horas un auxiliar del Juzgado leyó el veredicto y les entregó una copia de los argumentos. El fallo fue por unanimidad.

Los magistrados descartaron el agravante por la guarda que había sido propuesto por la querella y la fiscalía. “El hombre estuvo con el chico a solas durante 30 minutos y la madre estaba en el hall”, explicó a Infojus Noticias el fiscal Amallo. El funcionario adelantó que analizará los argumentos durante la feria judicial y evaluará si apela o no. “Estoy conforme porque pudimos probar el abuso. La prueba directa era poca pero había mucha prueba indiciaria”, dijo.

Ramiro, que tiene síndrome de Down, se atendía en el centro terapéutico después de haber sido operado de una cardiopatía congénita. En el mes de octubre, el kinesiólogo les dijo a los padres que las sesiones de rehabilitación tenían que ser a solas con el niño. En la última sesión, Torres cambió de consultorio. Llevó a Ramiro al que estaba más alejado y el único que tenía traba interna. Según se desprende de la instrucción y el debate oral, le tapó la boca y abusó de él. El nene salió de ahí llorando. Cuando llegaron a su casa y su madre le cambió el pañal encontró vello púbico y lastimaduras. En ese momento iniciaron el camino de la denuncia judicial cuando fueron a la Comisaría de la Mujer. “A mi hijo lo destrozaron”, expresó hoy el padre, todavía movilizado por la decisión de los jueces.

Torres llegó al debate oral detenido en el Penal 19 de Saavedra. Durante las audiencias, declararon peritos, médicos, psicólogos, familiares y personal de la clínica Soles de San Fernando. Natalia, la madre de Ramiro, relató entre llantos cómo se dio cuenta que su hijo había sido abusado y todos los tratamientos a los que tuvo que ser expuestos después.

Durante el juicio quedó acreditado el abuso. “Hay todo un marco probatorio indiciario que nos lleva a concluir que en esa jornada, cuando fue atendido, el niño fue violado”, planteó el fiscal Amallo en su alegato, según reconstruye una nota de El Argentino Zona Norte.

El representante del Ministerio Público Fiscal destacó que no se pudo obtener un perfil de ADN por los geles inhibidores del pañal, pero sí se comprobó la presencia de líquido seminal en la materia fecal de la víctima.

El médico legista que atendió a Ramiro confirmó que las heridas eran compatibles con el abuso y dijo que había sido “rápido, agudo y violento.  La psicóloga y la pediatra del nene hablaron de las consecuencias del abuso.

Cuando fue su turno para los alegatos, el abogado defensor del kinesiólogo, Pablo Karklins, pidió la absolución. Planteó que no hubo pruebas suficientes para condenarlo.

Esta mañana los familiares del nene no estuvieron solos. Muchos se convocaron a través del Facebook “Justicia Para Rami” y se acercaron hasta los Tribunales de San Isidro para acompañarlos. “No al abuso sexual infantil. Detenerlo es tarea de todos”, decían los carteles y banderas que levantaron.

MFA/PW