Esta tarde también hubo disturbios, pero no hubo detenidos ni heridos. La Selección argentino iba a saludar a los fanáticos desde un palco en el Obelisco, pero por el colapso de las autopistas no iban a poder llegar hasta el microcentro porteño, según informó un comunicado de la AFA.
Los esperaban desde el mediodía. Quienes no pudieron ir a recibir a Ezeiza a la selección Argentina de fútbol optaron por convocarse en el Obelisco. El equipo iba a pasar a saludar a los hinchas, pero tras el acto oficial –en el que participó Cristina Fernández de Kirchner-las autoridades de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) dieron a conocer en un comunicado que no irían hasta el centro porteño por el colapso de las autopistas. Poco a poco los organizadores fueron desarmando la estructura de hierro instalada en el cruce de las avenidas Roque Saénz Peña y Carlos Pellegrini para recibir a los jugadores. Los fanáticos se quedaron igual y, otra vez, comenzaron los disturbios. Volaron botellazos y piedrazos pero no hubo detenidos ni heridos, confirmaron a Infojus Noticias. La Policía Federal controló la zona.
Ayer, 120 personas terminaron detenidas y veinticinco policías resultaron con heridas leves en los disturbios en la zona del Obelisco durante los festejos por el subcampeonato obtenido por la selección nacional, informaron a esta agencia desde el Ministerio de Seguridad de la Nación. El juez correccional porteño Oscar Fente abrió una causa penal por "lesiones leves y resistencia a la autoridad" y pidió a la Policía Federal informes de antecedentes de los detenidos para resolver su situación. El magistrado pidió también filmaciones de los disturbios y ordenó que se revise a los detenidos.
Anoche, pasadas las 21, un grupo de personas que se encontraban en la zona del Obelisco provocaron destrozos y saqueos a comercios y se enfrentaron con la Guardia de Infantería de la Policía Federal. Fuentes del Ministerio de Seguridad confirmaron que 25 efectivos resultaron heridos. "No eran más de 200 o 300, estaban alcoholizados y no tenían una agenda de robo sino que iban haciendo lo que hacen cuando van a la cancha, explicaron. "Por otro lado lo que hubo entorno del Obelisco fueron personas que tenían objetivos como bancos o joyerías".
Las investigaciones judiciales recayeron en la Fiscalía Nacional en lo Correccional N°10, la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N°25 y la Fiscalía Nacional de Menores N°6, a cargo de Laura Belloqui, Martín Mainardi y Fernando Rouco Oliva, respectivamente. Otros hechos son investigados por la justicia Contravencional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
“Según informaron desde la Fiscalía de Belloqui, hasta el momento investigan las circunstancias en las que una persona resultó levemente herida en la intersección de Carlos Pellegrini y Avenida Córdoba, al tiempo que el Juzgado Nacional en lo Correccional N°10, a cargo de Carlos Ponte, intervino directamente en otros hechos”, informó el Ministerio Público Fiscal a través del portal fiscales.gob.ar.
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, afirmó que los desmanes "no fueron producto de la casualidad", sino que "hubo una planificación" para generar caos. "Estos delincuentes intentaron llevar zozobra en un lugar de festejos para poder así hacer saqueos, robar a la gente y pelearse entre ellos", dijo.
"Lo de ayer era responsabilidad de la Policía Metropolitana, no de la Policía Federal", dijo Berni. "Lo normal es que nunca aparece, ¿o ustedes alguna vez la vieron?", preguntó el funcionario. Y agregó: "Me parece bueno que sea vea lo que pasa todos los días y que la gente lo vea"
Esta mañana la zona del Obelisco y la plaza de la República amanecieron con rastros de destrozos y robos a comercios, producidos durante los incidentes registrados en los festejos por el desempeño de la selección argentina de fútbol en el Mundial de Brasil. El dueño de un bar destrozado ubicado en Cerrito y Lavalle contó a al canal Todo Noticias (TN) que vio por televisión cuando saqueaban su local y que "sabía que no había a quién llamar. Rogaba que pasaran rápido para que destrozaran los menos posible".
Otro comerciante, que sufrió la rotura de toda la marquesina de su local gastronómico, se quejó en declaraciones a la señal informativa C5N por la demora de "más de dos horas en llegar al lugar" de la Policía Metropolitana.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, desatacó "el orgullo que el pueblo argentino siente por su Selección" y repudió los "hechos vandálicos" que "empañaron parte de la fiesta popular de carácter espontáneo" que surgió tras la derrota. Capitanich contó que, a raíz de los "hechos vandálicos" que se produjeron en el centro porteño "hasta las 3.30 de la madrugada", fueron detenidas "cerca de 100 personas" y sostuvo que esos episodios, que también se repitieron en La Plata y Mar del Plata, "no pueden empañar una manifestación espontánea del pueblo argentino".
Luis Cevasco, fiscal general adjunto de la ciudad, explicó a radio Vorterix que "los detenidos están filmados, se ve su accionar".
La policía desarrolló un operativo que se extendió desde la avenida Belgrano hasta Córdoba y desde Callao-Entre Ríos hasta Leandro N. Alem. "La idea fue aislar a los marginales para minimizar riesgos y poder detenerlos. Así se produjeron las cien detenciones y se logró que no hubiera una sola persona que estuviera festejando que no resultara herida".