La denuncia del fiscal Nisman se basaba en un supuesto pacto para comprar petróleo iraní debido a una "crisis energética". Expertos aseguran que Argentina solo importa el 1,9% del petróleo que consume. Y que el petróleo iraní le saldría al país mucho más caro que cualquier otro.
“La argumentación energética y petrolera esgrimida por Nisman, medular para su denuncia es insostenible”, sostuvieron Federico Bernal, director de Observatorio de la Energía, la Tecnología y la Infraestructura para el Desarrollo (OETEC), y el especialista en Economía y responsable de Investigación de la organización, Ricardo Dicco, en un informe donde analizaron diferentes variables de la situación energética y refutaron la denuncia de Nisman.
“Entre 2003 y 2013 la demanda del Mercado Eléctrico Mayorista a nivel hogares, industrias y comercios creció un 47%, 43% y28% respectivamente”, sostuvieron en un análisis donde se indicó que “la demanda anual en gigatavios/hora del sector residencial creció entre 2204 y 2014 el doble de lo que creció entre 1983 y 2003”.
“¿Puede una economía crecer e incorporar a millones de argentinos al sistema -excluidos y postergados por décadas- en un escenario de 'severa crisis energética'?", se preguntaron los especialistas al refutar el principal argumento utilizado por Nisman para imputar a la Presidenta, al canciller Héctor Timerman y a dirigentes sociales y políticos.
En cuanto al petróleo, los autores afirman que la Argentina importa 1,9% de petróleo, mientras que la producción local participa con el 98,1% restante. “La Argentina no sólo importa volúmenes insignificantes, sino que además es exportador de petróleo”, indicó el informe con un pormenorizado relevamiento basado en datos de la Secretaría de Energía de la Nación.
Además, agregó que el petróleo iraní “antes de ser adquirido por nuestro país debe necesariamente ser procesado en origen debido a su composición de azufre (1,3% o superior)”, de manera que, de importarse, “sería más costoso”.
“La denuncia se trata de uno más de los tantos atentados desinformativos a los que medios como Clarín y La Nación, entre otros, nos tienen acostumbrados”, aseguraron a la vez que cuestionaron que “no se hayan tomado el trabajo de convocar a técnicos de las autoridades competentes nacionales como Secretaría de Energía, CAMMESA, ENARGAS, etc”.
“En efecto, la denuncia arma su forzado y caprichoso relato incriminador echando mano a los mismos artículos críticos que los referidos matutinos vienen publicando en relación a la causa AMIA desde comienzos de la época kirchnerista”, explicaron los especialistas al cuestionar que las fuentes utilizadas para el informe de Nisman “no son gubernamentales, sino que se trata de la interpretación de dichos de terceros surgidos de intervenciones telefónicas”.