La presidenta Cristina Fernández de Kirchner denunció que la multinacional provocó la situación para “afectar el orden económico financiero”. El Gobierno presentará una denuncia ante la Justicia Federal y llevará el caso a la Securities and Exchange Commission de los Estados Unidos. Además, ratificó la voluntad de pago de las deudas contraídas.
El gobierno nacional denunciará a la empresa multinacional, que tiene entre sus accionistas a un fondo buitre vinculado a Paul Singer, ante la Justicia Federal. Lo hará utilizando la Ley 26.733 (Antiterrorista) y acusó a la compañía por “alteración del orden económico financiero”. Así lo señaló esta tarde la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y anticipó que el caso será llevado ante la Securities and Exchange Commission (SEC), que regula el mercado financiero en Estados Unidos.
“Es un verdadero caso de manejo fraudulento y de intento de atemorizar a la población. Esto fue acompañado también por ciertos medios que se plegaron a la maniobra y con grandes titulares anunciaron que 400 personas se quedaban en la calle y que la industria gráfica estaba mal”, dijo Cristina durante el acto en Casa de Gobierno, donde se presentó el plan "Vivir Más Cerca".
En ese sentido, denunció que "hay un entramado mafioso internacional", al explicar que la imprenta Donnelley que pidió la quiebra un viernes y se la concedieron el lunes está integrada "en un 60 o 70 por ciento por fondos de inversión". Y explicó que el fondo buitre de Paul Singer tenía el 7 por ciento de una multinacional y que se lo vendió al fondo BlackRock, el mismo que integra la imprenta Donnelley.
"Coincidentemente, pero en realidad nunca hay coincidencia, nos encontramos con una imprenta que había presentado quiebra queriendo crear un clima de temor entre los trabajadores", aseguró.
Además, la jefa de Estado sostuvo que "los fondos buitre no quieren arreglar no sólo por avaricia o por codicia, sino porque tienen una decisión política y geopolítica de querer volver a endeudar a la Argentina".
Durante su discurso en Casa de Gobierno, la mandataria cuestionó las declaraciones periodísticas del titular del fondo buitre Aurelius, Mark Brodsky, quien ayer había advertido que "para Argentina lo peor está por venir".
“Esto es como el caso del viejo prestamista que, a lo mejor, no le interesaba que le devolvieras el dinero sino quedarse con tu casa”, dijo Cristina luego del acto en el salón y durante un discurso a los militantes que se habían reunido en los patios de la Casa de Gobierno.
Además, insistió que el Gobierno tiene la decisión de cancelar las deudas contraídas. “Les pedimos que le dejen el derecho soberano a un país a pagar y por eso estamos reclamando los argentinos”, afirmó.