Los seis integrantes del Tribunal de Enjuiciamiento de Magistrados del Ministerio Público, están reunidos para resolver como sigue el proceso de juicio político contra el fiscal José María Campagnoli luego de la renuncia de uno de sus miembros.
Desde el mediodía están reunidos los seis integrantes del Tribunal de Enjuiciamiento de Magistrados del Ministerio Público. El objetivo: resolver como sigue el proceso de juicio político contra el fiscal José María Campagnoli. La semana pasada, el tribunal pasó a cuarto intermedio porque no había acuerdo sobre la recusación al juez sustituto que el tribunal convocó luego de la renuncia de María Cristina Martínez Córdoba, representante en el tribunal de la Defensoria General de la Nación.
Los miembros del jury comenzaron a deliberar al mediodía. El tema central será la recusación planteada por los fiscales que cumplen el rol acusador, Adolfo Villate y Marcelo García Berro, contra el suplente, Leonardo Miño. A ello se suma que la Defensoría General nombró al defensor Nicolás Toselli como reemplazante de María Cristina Martínez Córdoba,
Lo que está caído “es el proceso, no la acusación” dijo Villate en los últimos días pero la defensa del fiscal suspendido, encabezada por Ricardo Gil Lavedra, plantea pedir la aplicación de lo que se conoce como “ne bis in idem”: no se puede juzgar dos veces a una persona por los mismo hechos.
El presidente del tribunal sigue
La semana pasada, además de decidir el cuarto intermedio el jury rechazó un pedido de del presidente del tribunal, Daniel Adler, por no citar a los vocales suplentes del tribunal a presenciar las audiencias. La presentación había sido realizada por la ONG autodenominada Ciudadanos Libres por la Calidad Institucional, que reclamó la destitución.
El tribunal desestimó “in límine” la presentación de la ONG porque consideró que “no se encuentra configurado el supuesto de inconducta grave reglamentario”. El rechazo está firmado por Ernesto Kreplak, Rodolfo Ojea Quintana, Juan Octavio Gauna, Adriana Donato y Francisco Panero.
A su vez, el legislador porteño Pablo Ferreyra denunció ante la justicia federal a Campagnoli por haber seguido usando en su auto chapas patentes que consignaban su condición de integrante del Ministerio Público Fiscal pese a que estas ya fueron sacadas de circulación.
Las amenazas
También se conocieron las amenazas que había sufrido la fiscal Cristina Caamaño, reemplazante de Campagnoli en la fiscalía. Las amenazas comenzaron cuando se hizo cargo de la fiscalía de Saavedra y Núñez. La fiscal contó que "las primeras fueron la noche del 15 al 16 de abril, por Twitter, y venían de gente que utiliza apodos. Desde que asumí como subrogante en la fiscalía de Saavedra, a fines de febrero de este año, algunos empleados y funcionarios comenzaron a mandar twits desprestigiándome a mí y a mi trayectoria”.
Esto último “originó un oficio a la Procuración. Los mensajes decían, por ejemplo, cerda, hija de puta, ya te vamos a encontrar, es cuestión de tiempo ", precisó. Por eso presentó una denuncia ante la fiscal contravencional, Daniela Dupuy que se ocupa de delitos informáticos, dado que las amenazas eran por Twitter.