El juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Eugenio Zaffaroni, también lamentó que Thomas Griesa, sea considerado por algunos medios como “el juez por antonomasia de los Estados Unidos cuando, en verdad, es un juez provincial”.
El juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Raúl Zaffaroni, consideró “un invento” la figura de desacato aplicada por el juez neoyorquino Thomas Griesa en contra de la Argentina por el juicio con los fondos buitre. Lamentó que el magistrado estadounidense sea presentado por algunos sectores mediáticos como si fuera “el juez por antonomasia de los Estados Unidos cuando, en verdad, es un juez provincial”.
“No sé qué significa el desacato; el desacato es un invento que no sé qué es”, dijo Zaffaroni en un reportaje por Radio América y calificó a todo el expediente de “escándalo”. También criticó “la grosería incalificable de la Corte Suprema de los Estados Unidos, que no quiso abrir el caso”. “Me pregunto qué hubiera pasado con la Corte nuestra si hubiéramos dicho ‘no nos interesa’. ¡Nos hubiese matado la gente con razón!”, apuntó.
El juez que dejará la Corte Suprema a fin de año, negó la posibilidad de ser candidato en las próximas elecciones. “A fin de año dejo la Corte. Hay una disposición constitucional que dice que tengo que irme. Yo participé de la Convención Constituyente, y asumí y juré con esta Constitución, con la Reforma de 1994 vigente”, recordó. En ese marco agregó que “no aguantaría el estrés de un cargo ejecutivo. Tengo que volver a la actividad académica, y en las universidades del conurbano tenemos que formar juristas, futuros jueces, fiscales, defensores y abogados”.
Zaffaroni habló también del narcotráfico y la penalización del consumo de drogas. Remarcó la necesidad de reforzar la política “asistencial” de tratamiento a quienes sufren una adicción, “distinguiéndola nítidamente” de lo que es la “represión del narcotráfico”. “La no punición del consumidor es algo que sostengo desde hace 30 años; es absurdo, lo único que hace es derivar esfuerzos del control del narcotráfico, que es adonde tendría que ir”, dijo.
Ante la pregunta de si la Argentina es un país productor de drogas, aclaró que “no podemos ser un país de producción porque, afortunadamente, no tenemos la materia prima. No porque seamos inocentes sino porque la materia prima para producir cocaína es demasiado voluminosa. En cocaína nunca podemos ser país de producción. Podrá ser de marihuana porque se planta en cualquier lado, hasta en los balcones”.
“Los cañones tienen que enfocarse hacia la atención del tóxico-dependiente desde el punto de vista de la salud, y hay que distinguirlo nítidamente de lo que son los consumidores no dependientes y de lo que es el narcotráfico, adonde hay que apuntar los cañones también.”
Al referirse a las críticas del padre José María “Pepe” Di Paola al titular de la Sedronar, el sacerdote Juan Carlos Molina, que habló en favor de despenalizar el consumo, Zaffaroni comentó: “hay sacerdotes de villas que ven un problema dramático como es el paco, que es un veneno que destruye pibes muy chicos”. “El que consume paco no va a buscar tratamiento, pero no tenemos que confundir internación compulsiva con punición. Ahí hay que meterse y tener una política enérgica, pero siempre desde el punto de vista de un problema de salud.”