Carlos Castañeda y Jorge “Fino” Palacios, ex policías de la Federal, están imputados por hacer fracasar los allanamientos que se realizaron a los Kanoore Edul. Y los ex fiscales Mullen y Barbaccia, acusados de consentir el pago de 400 mil dólares a Carlos Telleldín, para que involucrara en el atentado a ex policías de la Bonaerense.
Los ex policías de la Federal Carlos Castañeda y Jorge “Fino” Palacios estaban citados a declarar hoy, acusados de colaborar en el fracaso de la investigación del atentado en la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). Pero esta mañana, Castañeda se negó a declarar. Palacios lo hizo pero no contestó preguntas.
Santiago Marino Aguirre, el defensor de los ex fiscales Eamon Mullen y José Carlos Barbaccia, volvió a cuestionar la legitimidad de las querellas para acusar a sus defendidos, quienes también estaban citados a declarar hoy. Puntualmente, pidió la nulidad de la resolución del tribunal que la semana pasada rechazó esta posibilidad. El tribunal tuvo presente el planteo y postergó la resolución.
Eamon Mullen
Cuando llegó su turno, Müllen -igual que Palacios- aclaró que no iba a contestar preguntas y que se reservaba el derecho de ampliar la indagatoria durante el transcurso del juicio. El ex fiscal admitió que en los 10 años que estuvo en esa “complejísima causa”, pudo haber cometido errores, pero dijo: “Soy absolutamente ajeno a los gravísimos hechos que se me imputan”.
Por su parte, el segundo jefe de la SIDE menemista Juan Carlos Anchezar, no se presentó en la audiencia, según informó su abogado, por recomendación de su hijo médico al advertir que tiene taquicardia. Pidió postergar su declaración para el jueves 17.
El jueves pasado el Tribunal Oral Federal 2 escuchó la negativa a ser indagados del ex presidente y del ex juez Juan José Galeano. Hoy también les dio esa a opción a los acusados por desviar la investigación que conducía a los Kanoore Edul, familia cercana por vínculos y origen a la de Carlos Menem, también imputado por el encubrimiento.
Palacios y Castañeda están acusados por hacer fracasar los allanamientos que se realizaron en tres inmuebles de los Kanoore Edul, en agosto de 1994. Por ejemplo, en uno de ellos recién ingresaron a las 19:30, diez horas después de haber llegado al lugar; y por haberlos hecho de manera sucesiva en lugar de simultáneamente, apelando al factor sorpresa. Las querellas y la fiscalía, consideran que sin su colaboración Galeano no podría haber cumplido la orden presidencial que desvió el curso de la investigación.
Los ex fiscales Mullen y Barbaccia están acusados porque habrían consentido el pago de 400 mil dólares de la SIDE a Carlos Telleldín, para que involucra falsamente en el atentado a un grupo de policías de la Bonaerense. Y Anchezar responde como autor del delito de abuso de autoridad y coautor del delito de falsedad ideológica, por fraguar y ocultar información para consumar el encubrimiento.
El pedido de Anzorreguy
En esta etapa del juicio, tramita ante el tribunal el pedido del ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy para que se lo excluya del proceso. Para fundar su pedido, Anzorreguy alegó motivos de salud. Razón por la que el tribunal le encargó al Cuerpo Médico Forense de la Justicia Nacional que determine si está en condiciones psicofísicas de “retener y procesar información con la dinámica que requiere un juicio oral”.
El ex jefe de la SIDE está acusado, entre otros hechos, porque bajo su gestión se fraguaron actas de allanamientos, y se perdieron las transcripciones de las intervenciones telefónicas a los Kanoore Edul.
Los médicos deberán realizar un diagnóstico neurocognitivo del imputado, que hasta ahora solo estuvo presente en una de las cuatro audiencias del juicio que desde el 6 de agosto se realiza en la sala AMIA, en tribunales penales de Comodoro Py.
MB/RA/AF/MEL