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La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) detectó que unas 1200 empresas utilizaron facturas apócrifas. “El uso de este tipo de facturas falsas nace en el sector privado y termina en el sector privado", dijo ayer en conferencia de prensa el titular del organismo Ricardo Echegaray. Anunció también que se presentó una denuncia judicial al respecto.

"Es un tema pergeñado por el sistema privado para no pagar impuestos. Se podría escribir muchísimo sobre facturas truchas, como es el caso de El Tehuelche, de un diputado nacional. También está Aeropuertos 2000, pero no por eso se puede instalar una situación irregular. Está Cablevisión, el Banco Santa Cruz. Está YPF, cuando era sociedad anónima. Son muchas", señaló Echegaray.

El funcionario formuló estas declaraciones luego de que el diario La Nación publicara un artículo en el que señalaba que el empresario patagónico, Lázaro Báez, era investigado por la utilización de facturas apócrifas. “Quiero remarcar, porque no sé si es con intencionalidad o falta de conocimiento técnico, que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner no es socia de Lázaro Baez“, subrayó.

El funcionario dio a conocer un extenso listado de empresas que usan facturas truchas y aseveró que, para cierto sector de la prensa, "parecería que el único caso de facturas truchas fuera el de Lázaro Báez”. Echegaray aseguró que las empresas del grupo Baéz “están bajo fiscalización” por la utilización de esas facturas, y negó que se hayan cambiado a los funcionarios que investigaron a esas firmas. “Los mismos que la iniciaron, terminaron la investigación”, dijo el titular de la AFIP.

En la conferencia Echegaray señaló que la utilización de esas facturas no necesariamente significa una violación de las normas, porque “se dan casos en los que un empleado infiel puede utilizar facturas de otro”.

Más allá de los casos puntuales, Echegaray anunció que desde la AFIP tomaron la decisión “de dar un salto de transparencia y calidad institucional” y publicar en la página web del organismowww.afip.gov.ar “cuáles son las usinas de facturas y cuáles las empresas que utilizan esas facturas". Estimó que en esa publicación “habrá alrededor de 10.000 facturas apócrifas” y que “en una primera etapa se informará de unas 1.200 empresas que las utilizaron”.

No obstante señaló que “una cosa es estar en esa base de datos, y otra suspender a esas empresas en la utilización del CUIT”, que es el primer grado de sanción. Aclaró que corresponde al Poder Judicial determinar si el accionar de esas empresas fue deliberado para sacar provecho.