Está en el country Everlinks, ubicado a 15 minutos de la basílica de Luján. El terraplén de la cancha de golf está construido sobre la margen del río, donde antes era un espacio para que absorbía el agua.La comisión de inundados hizo la denuncia ante el municipio.
Un terraplén en la cancha de golf del countrie Everlinks hace un cuello de botella con el río Luján y si bien no es la causa principal de la inundación, empeora la gravedad. La denuncia la hizo la Comisión de inundados del municipio, formada después de la crecida grande de 2012, en la municipalidad.
"Construyeron un terraplén de tierra que le roba espacio a la margen del río, y esa zona es la que absorbe cuando hay crecidas. Que haya menos espacio de absorción empeora la situación, que ya está complicada con la pérdida de humedales", dijo a Infojus Noticias Sergio Frascaroli, miembro fundador de la Comisión.
Everlinks está a 15 minutos de la basílica de Luján. Tiene 224 hectáreas y 3 kilómetros de costas sobre el río Luján. “Este club combina en perfecta armonía más de 350 lotes de 2000 metros con una imponente cancha de golf. Las calles recorren los diferentes hoyos, asegurando que todos los terrenos presenten una ubicación preferencial sobre el campo de juego”, dice la web del countrie.
El territorio de Everlinks está rodeado de otros complejos residenciales y millonarios: La Elina, Estancia San José y Santa Inés. Según la Comisión cuando los dueños dijeron que construirían un campo de golf no aclararon que eso contaría con un terraplén que le quitaría espacio a la margen del Luján.
"Tenemos que pensar que ese terreno hace apenas unos años era humedal que absorbía y ahora es una pared de tierra", dijo Frascaroli, que junto a la Comisión tiene varios informes en los que se detalla el impacto de la construcción en el terreno.
La calle Alsina se transforma en Beschtedt después del puente de la Ruta 7. Al fondo está el Everlinks, término que en el golf significa un tipo de campo de juego enclavado en la naturaleza y con terrenos arenosos, que no son regados naturalmente.
El río empezó a bajar
El río Luján había bajado poco más de 2 metros en tres días, pero las lluvias del domingo complicaron la situación. El jueves el agua llegó a un pico de 5,32 metros y después inició un proceso de descenso hasta 3,30 metros, a las 17 del domingo. El último reporte de los bomberos voluntarios de hoy a las 12 señaló que la altura está en 4.97.
En la zona céntrica de Luján, en las cuadras cercanas a la basílica, el agua se está yendo "más lento que otras veces", dicen los comerciantes. En la calle Muñiz al 400 el agua solo llegó a la vereda y no entró a las casas. Pero tiene otra complicación. Al subir el cauce y aumentar la presión los desagües de los baños y las cocinas en vez de tragar agua la escupen. Por eso varios vecinos tienen sus puertas abiertas y se ve salir agua. La policía de tránsito por estos días hace guardia civil para controlar los ingresos a las calles inundadas. En vez de autos, se ven canoas.