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Infojus Noticias

11-4-2015|10:35|Fallo Nacionales
La demanda la inició un juez que tuvo la causa por agresiones

La Corte confirmó una sentencia contra la ex pareja de Andrea del Boca

El máximo tribunal del país condenó a Ricardo Biasotti y a su abogada, Beatriz Anzoátegui, a indemnizar al juez de Instrucción Ricardo Farías. Deben pagarle 60 mil pesos -con intereses podría llegar a más de 100 mil- por haberlo denunciado en el Consejo de la Magistratura y ante la justicia penal. Biasotti había sido denunciado por la actriz por una supuesta agresión.

  • Foto: Télam.
Por: Gustavo Ahumada

La Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó una sentencia de la Cámara Civil que condenó a Ricardo Biasotti, ex pareja de la actriz Andrea del Boca, y a su abogada, Beatriz Anzoátegui, a indemnizar al juez de Instrucción Ricardo Farías con más de 60 mil pesos por haberlo denunciado en el Consejo de la Magistratura y ante la justicia penal. Farías fue el juez que tuvo en sus manos la causa penal por las lesiones que años atrás sufrió la actriz y donde estaba presuntamente implicado Biasotti.

En sólo una página –fechada el martes pasado- el máximo tribunal del país con las firmas de los jueces Ricardo Lorenzetti, Juan Maqueda y Elena Higthon de Nolasco desestimó la queja que presentó la abogada Anzoátegui porque no cumplió con la acordada 4/2007, una norma que regula las presentaciones ante la Corte, y confirmó el fallo que ordena la indemnización. Si se suman los intereses de todos estos años la cifra aumentaría a más de 100 mil pesos.

En mayo de 2004 la actriz Andrea del Boca denunció en la justicia penal a Biasotti, su entonces pareja, por una supuesta agresión ocurrida a fines de marzo de ese mismo año en la puerta del departamento, cuando tenía a la hija de ambos en brazos. Allí comenzó todo: denuncias cruzadas a jueces en los medios y otras que se plasmaron en los mismos tribunales.

Mientras Biasotti denunció al juez que llevaba la causa penal, el juez civil que llevó la causa fue denunciado por la madre. En todo ese tiempo Biasotti era asistido por Anzoátegui como su abogada. “Fue un evidente tironeo entre poderosos, con luz mediática propia, que pretendieron llevar harina cada uno para su molino”, dijeron los jueces de la Cámara Civil años después, en 2009.

En las denuncias que presentaron en sede penal y en el Consejo de la Magistratura contra el juez Farías sostenían -entre otras cosas- que el magistrado había tenido supuestamente “falta de decoro” y denunciaban una supuesta “relación extremadamente afectuosa” con la secretaria del tribunal y la presunta ocultación y/o adulteración de un video esencial para la prueba de las lesiones que se le imputaban a Biasotti. Ambas denuncias finalmente serían rechazadas.

El contragolpe

El juez Farías, ya sobreseído en la justicia penal y con una denuncia desestimada en el Consejo, contratacó y presentó una demanda por calumnias en la justicia civil contra Biasotti y su abogada. En primera instancia se hizo lugar a la demanda del juez argumentando que “se puso en tela de juicio injustificadamente la idoneidad e imparcialidad del juez interviniente en la causa penal en la que se encontraba denunciado Biasotti” lo que revelaba “una elemental falta de prudencia” y “un exceso en el ejercicio de su derecho”.

Ambos insistieron y apelaron esa decisión, pero la sala E de la Cámara Civil resolvió de la misma manera y confirmó la sentencia. Los jueces Jorge Mayo, Liliana Abreut de Begher y Marcela Pérez Pardo, hablaron de una “conducta temeraria del denunciante y su letrada” y “la sinrazón del contenido de sus denuncias y su conducta dolosa” porque  “las irregularidades procesales no pueden justificar la continua denuncia de delitos durante varios años”.

Incluso en el trámite de la causa civil en la cámara el propio padre de la actriz Andrea del Boca, Nicolás del Boca, declaró que “fue una altercado sin mayores consecuencias, prácticamente sin querer se había lastimado”. La Cámara finalmente confirmó la condena y ordenó la indemnización, pero la abogada Anzoátegui agotó las instancias y fue a la Corte Suprema.  

Según la letrada, las denuncias contra Farías “fueron una consecuencia de su actuación, derivadas de la responsabilidad que le cabía como juez en la investigación que no se hizo, y que le ocasionó perjuicios a su cliente”.

Pero la Corte Suprema desestimó la queja que presentó confirmando lo que sostuvo la Cámara Civil: “La abogada tuvo una activa participación en cada una de las denuncias contra Farías, las que a la postre devinieron temerarias, efectuadas con ligereza y dolo, no pueden luego resultarles totalmente ajenas. Es evidente que existió un asesoramiento letrado para encausar las mismas, y proseguir con ellas hasta sus últimas consecuencias”.

GA/RA

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