Infojus Noticias

El abogado del encargado Jorge Mangeri adelantó hoy que el lunes próximo apelará y pedirá la  nulidad del procesamiento dictado ayer a su defendido por el homicidio agravado de Angeles Rawson, la adolescente cuyo cadáver fue hallado en el predio de la CEAMSE en José León Suárez el 11 de junio pasado, informó la agencia Télam.

"El lunes vamos a apelar esta resolución, vamos a apelar este procesamiento, vamos a pedir la nulidad de todo lo realizado hasta el momento. Si la Cámara hace lugar a nuestro pedido, habría que empezar todo el proceso nuevamente. No venimos a hacer terrorismo procesal, pero sí ejercer las garantías de Mangeri", dijo esta mañana al abogado Miguel Angel Pierri.

El juez Javier Ríos dictó ayer el procesamiento y la prisión preventiva de Jorge Mangeri por el homicidio de Ángeles Rawson. El magistrado lo acusa de “homicidio agravado por alevosía”, un cargo que prevé prisión perpetua. Ríos justificó el agravante por considerar que el encargado del edificio obró “a traición y sobre seguro”. Además, le trabó un embargo por un millón de pesos.

En su fallo, el juez estableció que Mangeri asesinó a la joven “entre las 9.50 y las 22.08 horas del día 10 de junio, después de haberla interceptado a las 9.50”. A esa hora la cámara de seguridad ubicada entre 15 y 30 metros de distancia de Ravignani 2360 registró el paso de la joven. Franklin Rawson, padre de Ángeles, reconoció que se trataba de su hija. Dominga, la empleada doméstica que estaba trabajando en ese momento en el departamento de PB A, donde vivía la familia de la adolescente, afirmó “que la joven nunca había llegado a su domicilio después de haber salido de la clase de gimnasia”. Este dato también es confirmado por uno de los hermanos de la chica. Para el juez, queda probado que Ángeles ingresó en el edificio pero no llegó a su casa.

“La interceptación de la persona tuvo lugar en el interior del edificio en el que vivía, lo que coloca en un lugar protagónico al portero del edificio Jorge Néstor Mangeri, quien se encontraba en funciones en ese horario”, dice el fallo. El juez explica que “el imputado contaba con la factibilidad de perpetrar el homicidio: resultaba conocido de la víctima para vulnerar cualquier resistencia natural (…) y por su función laboral como encargado del inmueble, contaba con acceso irrestricto a las dependencias de edificio en el que vivían, tales como el sótano, la terraza o su propio domicilio”, dice el fallo. De esta manera, explica el juez, Mangeri pudo haber asesinado a Ángeles “sin ser visto por otras personas, en un ámbito de privacidad y reserva”.

Para Ríos, Ángeles “intentó defenderse a partir de lo cual quedaron rastros genéticos debajo de las uñas” de los dedos índice, anular y mayor de su mano derecha. “Una de sus últimas acciones en vida fue la de defenderse contrayendo su dedo y manos con el fin de arañar a su agresor”.

Después, Mangeri “la ató de pies, manos y muslos, le colocó una bolsa plástica de nylon color verde en la cabeza “Día%’”. Le colocó una soga con varios nudos alrededor del cuello, “la puso en una bolsa de consorcio de color negra, para luego introducir a la víctima en el circuito de recolección y procesamiento de residuos del CEAMSE, cuyas maquinarias de compresión le causaron lesiones vitales”. “

Los vecinos declararon que la recolección de residuos se realizaba de domingos a viernes entre las 19.30 y las 20.00. “El imputado realizaba tal tarea pasando por los pisos y recogiendo las bolsas”. Una de las vecinas contó que el día del crimen lo vio a Mangeri en la terraza “vestido con shorts y remera y quizás descalzo”.

Más adelante el juez fundamenta la figura con la que procesó a Mangeri: “Homicidio agravado por alevosía”, que prevé una pena de prisión perpetua. “La figura contempla que el obrar del autor no le haya acarreado riesgo o que el mismo haya actuado sobre seguro”, dice el texto. Además, cita una “antigua fórmula española” que entiende la alevosía como un “obrar a traición y sobre seguro”. Es decir que, a partir de la diferencia de edad y física entre los dos (él pesa 108 kg y mide 1,78 metros; ella pesaba 51,2 kg y medía 1,65), Mangeri no corrió ningún riesgo al asesinar a Ángeles.

Además de procesarlo por homicidio agravado, el juez dictó la prisión preventiva de Mangeri, que estaba detenido desde la madrugada del 13 de junio, cuando se autoincriminío ante la fiscal Paula Asaro. Para ello tuvo en cuenta “la violencia desplegada en el hecho” y el riesgo de fuga. Además el juez dictó un embargo por un millón de pesos sobre Mangeri. En caso de ser hallado culpable deberá cubrir las costas del proceso penal y el pago de una indemnización civil.