Así lo decidió el juez federal Sebastián Casanello en un dictamen emitido hoy en el que se revoca el procesamiento del Presidente por entender que no existen pruebas para elevar a juicio oral y público. Además, en el dictamen aclaró que diferenciar entre las responsabilidades "políticas y las penales".
El juez federal Sebastián Casanello sobreseyó al presidente Mauricio Macri en la causa por escuchas ilegales telefónicas. De esta manera, el magistrado revocó hoy el procesamiento y firmó el sobreseimiento por entender que no hay pruebas para enviar al Presidente a juicio oral y público. Según la resolución, el magistrado entendió que hay una diferencia entre las responsabilidades "políticas y las responsabilidades penales" y que la tarea de la Justicia es reunir prueba para penar estas últimas, explicaron fuentes judiciales a la agencia Télam. El fallo de Casanello podría ser apelado por alguna de las dos querellas ante la Cámara Federal porteña.
En ese aspecto, el juez remarcó que a lo largo de más de cinco años de investigación no se reunieron pruebas para demostrar que Macri hubiese estado al tanto de las escuchas ilegales a las que fueron sometidos su ex cuñado Néstor Leonardo y el familiar de víctimas del atentado a la AMIA Sergio Burstein. Ambos habían pedido que el actual Presidente sea enviado a juicio oral con el resto de los procesados del caso, pero el juez desestimó estos planteos y sí tuvo en cuenta el dictamen del fiscal federal Jorge Di Lello, quien coincidió en la falta de pruebas contra el ex jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires
Con esta decisión, el procesamiento de Macri como supuesto partícipe de la red de escuchas montada bajo el amparo de la estructura del gobierno porteño quedó revocado. Los demás procesados, entre ellos el ex jefe de la Policía Metropolitana Jorge "Fino" Palacios, fueron ya enviados a juicio oral.