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La Cámara Federal de Casación Penal rechazó la recusación que la defensa de Fernando Carrera presentó contra Ana María Figueroa, una de las juezas que lo volvió a condenar a 15 años de prisión por lo que se conoce como la “Masacre de Pompeya”. La defensa había recusado a Figueroa por haber opinado luego de dictar el fallo que el documental del cineasta Enrique Piñeyro, The Rati Horror Show, “es una película ficcional”. Se pedía que la magistrada sea apartada de futuras intervenciones en el caso.

 

La jueza “ha salido pública y encendidamente a cuestionar la opinión de la defensa y a expresar su molestia por nuestras expresiones. Tenemos buenas razones para sentir temor por su posible falta de imparcialidad (aun inconsciente) a la hora de evaluar la admisibilidad de nuestro recurso”, sostenía el recurso presentado en la Cámara.

 

Los jueces Mariano Borinsky y Liliana Catucci desestimaron la recusación ya que consideraron que la jueza "se limitó a comentar su voto en el fallo, haciendo hincapié en las pruebas que evaluó y las que descartó, y las razones que sustentaron esa selección". 

 

“De la lectura de la pieza recusatoria se desprende que las molestias a las que hace referencia la señora juez aludieron a la objetivación empleada para descalificar la sentencia y no a constancias causídicas”, continua el fallo al que tuvo acceso Infojus Noticias.  Las argumentaciones de la defensa, para los jueces “carecen de incidencia en relación al apartamiento pretendido con posterioridad al fallo”,  que consideran que existe una “absoluta falta de fundamentación” para la recusación y la pretendida “inhibición” de la magistrada.

 

A fines de agosto, Figueroa había rechazado la recusación en su contra por lo que restaba la decisión de los otros dos integrantes de la sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal.

 

Ahora, la misma sala que condenó a Carrera deberá evaluar el recurso extraordinario de la fiscalía, que pidió “agravar” la pena, y el de la defensa y resolver si lo concede. En caso de concederlo la causa pasará a la Corte Suprema. Carrera seguirá en libertad hasta tanto el fallo quede firme, o sea, hasta que dicte sentencia la Corte. Si se rechaza, Carerra deberá recurrir a un recurso de queja y podría ir nuevamente a prisión .