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En la audiencia de hoy del juicio oral y público por la tragedia ferroviaria de Once se escucharán las declaraciones testimoniales de dos nuevos testigos. Esta semana se cumplen nueve meses del comienzo del debate por el choque, ocurrido el 22 de febrero de 2012, en el que murieron 52 personas y 789 resultaron heridas. En el proceso hay 29 imputados, entre ellos el motorman de la formación, Marcos Córdoba, y los ex secretarios de Transporte, Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi.  

Frente a los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 - Jorge Tassara, Jorge Gorini, y Rodrigo Giménez Uriburu-  declararán hoy el superintendente de Riesgo de Trabajo, Juan Horacio González Gaviola, y un inspector de la Comisión Nacional de Regulación de Transporte (CNRT).

La semana pasada fue detenido por falso testimonio Carlos Testuri, también funcionario de la CNRT. Testuri tuvo a su cargo una inspección que se realizó poco después del choque y en su informe dejó asentado que vio "irregularidades" que "habrían originado la colisión".

Testuri también firmó que la formación no tenía compresor y elementos de tracción y que los frenos recibían el aire del resto de la formación. Pero al momento de declarar en el juicio, y  ante las preguntas del fiscal Fernando Arrigo y de los jueces, se mostró reticente y comenzó a responder "no me acuerdo" o "no lo puedo precisar". Testuri se amparó en la falta de memoria y sostuvo que el día de la inspección no había tenido una buena visual del furgón del andén al inspeccionarlo el día de la tragedia.

Tal como sucedió en situaciones anteriores tanto Arrigo como los jueces del Tribunal le recordaron al testigo que estaba obligado a decir la verdad. Después de varias oportunidades en las que Testuri continuó respondiendo con evasivas se ordenó su detención por falso testimonio.

En junio y agosto la misma situación se dio con los guardas del tren accidentado, Miguel Angel Gerónimo y Patricio Juárez, quienes también se mostraron reticentes a contestar preguntas del Tribunal y fueron detenidos.

Los imputados

Junto a Córdoba, Schiavi, y Jaime también están imputados  Sergio Claudio Cirigliano, Marcelo Alberto Calderón, Carlo Michele Ferrari, Carlos Alberto Lluch, Sergio Daniel Tempone, Jorge Álvarez, Guillermo Alberto D’Abenigno, Jorge Alberto de los Reyes, Alejandro Rubén Lopardo, Carlos Esteban Pont Vergés, Daniel Fernando Rubio, Víctor Eduardo Astrella, Oscar Alberto Gariboglio, Francisco Adalberto Pafumi, Pedro Roque Rainieri, Roque Ángel Cirigliano, José Doce Portas, Antonio Guillermo Luna, Pedro Ochoa Romero, Laura Aída Ballestero, Antonio Marcelo Ricardo Suárez, Miguel Werba, Daniel Guido Lodola, Luis Alberto Ninoná, Antonio Eduardo Sícaro, y Mario Francisco Cirigliano. Ochoa Romero y Sícaro eran funcionarios, precisamente, de la CNRT.

De acuerdo al requerimiento fiscal de elevación a juicio, todos, menos Córdoba, están acusados por los delitos de defraudación contra la administración pública (previsto por el artículos 174 -inciso 5°- en función del 173 -inciso 7°- del Código Penal) y descarrilamiento culposo (196 -primer y segundo párrafos-). Según el Código Penal, esos delitos tienen una escala de pena de 2 a 6 años de prisión y de 1 a 5 años de prisión, respectivamente.

Córdoba está imputado por el delito de descarrilamiento culposo (art. 196), que tiene una escala de pena de 1 a 5 años de prisión.

Durante el juicio está previsto que declaren más de 350 testigos y se estima que podría extenderse hasta mediados del año próximo.