Un nuevo plazo para reubicar a las mascotas desalojadas de La Boca
Un matrimonio vivía en una fábrica abandonada hasta que fueron desalojados a fines de diciembre junto a sus 28 perros y 12 gatos. Los nuevos dueños de la propiedad quieren tapiar las entradas para hacer remodelaciones, pero una orden judicial lo frenó.
Foto: Patrick Haar.
Un matrimonio de ancianos fue desalojado el 29 de diciembre de la fábrica abandonada en la que vivían, en el barrio porteño de La Boca. Ahora él está internado en el hospital Argerich y ella una vez por día vuelve a la que fue su casa y alimenta a las mascotas. Tenían 28 perros y 12 gatos. La empresa que compró el galpón quiere tapiar la propiedad para empezar las remodelaciones, aunque una medida judicial dio quince días para que los animales sean reubicados. Hoy venció ese plazo. Y después de una reunión con el apoderado de la empresa, la fiscalía y el gobierno de la Ciudad, se concedieron quince días más para dar en adopción a los animales. El abogado de la pareja también estuvo presente.
“Nos quedan alrededor de veinte mascotas para dar en adopción y sentimos que lo de hoy fue un logro, ya que si no se daba el nuevo plazo hubieran quedado en la calle. Seguimos buscando casa para ellos y personas que quieran hacer adopciones responsables. El acuerdo incluye que la señora pueda ir una vez por día a dar agua y alimentos a las mascotas”, dijo a Infojus Noticias Juan Ignacio Serra, miembro de FUNDANH y magister en Derecho Animal.
A fin de año, cuando la policía llegó con la orden de desocupar la fábrica, la señora se quedó asombrada: nadie le había dejado una orden de desalojo. Estaba sola porque su marido está internado, esperando para que le hagan un bypass. La fábrica en que vivían está en Pedro de Mendoza 2300, y desde que el Astillero Mestrina presentó quiebra les permitieron alojarse en la propiedad con un comodato.
“Cuando la jueza ordenó el desalojo pidió a la división perros de la policía que lleve a los animales a la Facultad de Veterinaria, pero allí no reciben animales así que los trajeron de vuelta”, dijo María Antúnez, presidenta de la Fundación.
Una de las acusaciones que le hicieron a la anciana es el delito de usurpación, pero hay un informe de la policía Metropolitana que dice que la cerradura la puerta no tenía ningún signo de violencia ni deterioro, lo que puede inhabilitar la figura de usurpante. Los perros y gatos están todo el día adentro del galpón, que es grande y está bastante deteriorado.
A través de la página de Facebook https://www.facebook.com/todosxlosperrosfabricalaboca?fref=ts. , los proteccionistas se organizan para gestionar las adopciones.
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