Hace dos años Cristian Kapun comenzó a dudar de su identidad. Se acercó a la Unidad especializada para casos de apropiación de niños durante el terrorismo de Estado. Ahora el fiscal Delgado investiga si es hijo de desaparecidos o víctima de tráfico de bebés.
Cristian Kapun (31) y su hermana Cintia (29) se criaron en la ciudad de Buenos Aires, en la casa de quienes creían eran sus padres: Héctor Kapun y Aída Luz Rivadeneira. Hace dos años Cintia comenzó a dudar de su identidad y le trasladó el interrogante a su hermano. Tenían algunos elementos para sospechar. No existían en la familia fotos de Aída embarazada, pero si los hermanos preguntaban por qué no las había, la respuesta era llamativa: “traen mala suerte”, les decían. El casi nulo parecido físico con sus padres les llamaba la atención. La historia de que habían nacido en Misiones, durante una temporada allá por un trabajo temporal del padre- que era herrero-, no les cerraba- Y si sacaban las cuentas, su madre los había parido cerca de los cincuenta años.
Cristian llevó todas estas inquietudes a la Unidad especializada para casos de apropiación de niños durante el terrorismo de Estado, a cargo de Pablo Parenti, que funciona en la Procuraduría de delitos de lesa humanidad. “Teníamos las partidas de nacimiento, firmadas por un médico -posiblemente ligado a la dictadura- y por una oftalmóloga. Eran muchas dudas”, contó Cristian a Infojus Noticias. Parenti radicó la denuncia ante la Fiscalía en lo Criminal y Correccional Federal Nº 6. Hace pocos días, el fiscal Federico Delgado comenzó la investigación para determinar la identidad de los dos hermanos Kapun.
Cristian es periodista, y trabaja en radio América. “Soy uno de los encargados de contar las noticias, y ahora soy protagonista de ellas”, dice, extrañado por “estar del otro lado del mostrador”. Su pareja, también periodista, lo acompaña en esta nueva etapa que gira en torno a su identidad. “Mi hermana y yo buscamos nuestros orígenes, no buscamos venganza ni estamos enojados con nuestros padres de crianza”. Héctor Kapun falleció en 2011, un año antes de que comenzara este periplo. En la familia nunca hablaron de política. A partir de la investigación judicial, el expediente está caratulado como “Rivadeneira Aida y Kapun Héctor, sobre falsedad ideológica. Sustracción de menores de diez años y supresión del estado civil de un menor”. Pero los hermanos mantienen una buena relación con su madre de crianza.
Las pruebas
La partida de nacimiento de Cristian dice que nació el 25 de agosto de 1982 en la calle Ángel Acuña 286, en el barrio Villa Sarita de Posadas. De ese dato surgió la primera incongruencia, porque la familia nunca tuvo domicilio fuera de Capital Federal. Cuando Cristian planteó esta duda a sus padres, la respuesta fue un trabajo temporario en el litoral. Que no servía para explicar por qué su hermana también había nacido en Misiones, el 30 de mayo del ’84 –dos años después-, tal como consta en la partida de nacimiento.
Por la fecha en que nació, la posibilidad de que Cintia sea hija de desaparecidos es remota (si, además, el dato es fidedigno). Su caso podría emparentarse con el tráfico de bebés, una práctica denunciada infinidad de veces en esa zona mesopotámica y a la cual podría estar vinculado el médico que firmó una de las actas de nacimiento. Sin embargo, la identidad de Cristian sí podría estar ligada a algunas de las víctimas del terrorismo de Estado en la provincia de Misiones. Es sólo una de las hipótesis: también se baraja la posibilidad del robo o la compra/venta de bebés.
En la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI), que se dedica –entre otras tareas- a la búsqueda y localización de niños desparecidos durante la última dictadura, los registros incluyen a jóvenes nacidos entre 1975 y 1981, pero no hay casos de 1982. Lo mismo sucede con las bases de datos de Abuelas de Plaza de Mayo, sin datos de niños nacidos ese año.
El médico policial
En diciembre de 2002, una mujer de 52 años que intentaba salir del país con su hija de siete meses fue demorada en Ezeiza en un control de rutina. A los policías les llamó la atención que la niña estuviera inscripta como hija natural, a pesar de la avanzada edad de la mujer. Después, ella confesó: la había “adoptado” irregularmente. El médico policial Felipe Agüero había firmado la partida de nacimiento, y fue detenido por presunto tráfico de bebés. La partida de Cristian también está firmada por él.
Agüero se retiró de la profesión en julio de 2009. En 2012 fue citado a declarar como testigo en un juicio de lesa humanidad. Allí dijo que el médico policial Guillermo Mendoza había sido “un buen jefe”. Mendoza estaba acusado de supervisar las sesiones de torturas durante la dictadura, para analizar la resistencia de los detenidos y mensurar la intensidad de los tormentos. Ahora, Delgado pidió un resumen de los juicios en los que Agüero pudiera estar involucrado, para conocer qué es lo que ya investigó la justicia sobre el médico.
El primo
Las dudas sobre su identidad se ratificaron cuando un primo de Cristian, Horacio Petrocino, le confesó lo que sabía: que eran adoptados. A partir de estos datos, los hermanos pudieron conversar con su mamá de crianza, que reconoció que no era su madre biológica y les explicó que una vecina suya se había contactado con una médica en Misiones. Ella les había facilitado a ambos bebés sin que pagaran a cambio.
Según lo que indicó Kapun ante la fiscalía de Parenti, la entregadora habría sido Irma Raczkowski, que actualmente se desempeña como secretaria general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad de Misiones. En función de lo que Rivadeneira le confesó a Cristian, la médica “se dedicaba a ‘hacer tareas solidarias’ como ubicar niños de familias pobres en otras que buscaban tener un hijo, y que incluso habría anotado como propios a un niño y una niña a los que habría llegado a contactar de esa forma”, según se desprende del dictamen. Es decir, la misma Raczkowski también tendría dos hijos adoptados en forma irregular.
Las diligencias judiciales
El dictamen de Delgado, al que accedió Infojus Noticias, ordena la realización de un examen del ADN de los dos jóvenes para cotejar los resultados con el Banco Nacional de Datos Genéticos, y determinar si Cristian y Cintia son hermanos o no, y si existe algún vínculo con la pareja Rivadeneira – Kapun. También requiere informes a la AFIP y ANSES para conocer los antecedentes laborales y las actividades que realizaron los supuestos padres, y solicita la citación de Horacio Petrocino –supuesto primo de Cristian y Cintia- para que brinde su versión.
Además, Delgado pidió se remitan las actuaciones en las que pudieran estar involucrados los médicos Felipe Agüero e Irma Raczowski, y solicitó que se investigue la actividad de ambos y de Orlando Cádiz, que sería ex esposo de Raczowski y uno de los testigos del nacimiento de Cristian Kapun, según la partida.