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El Tribunal Superior de Justicia porteño (TSJ) realizó hoy una audiencia con los apoderados de los partidos políticos que participarán de las elecciones generales del próximo 5 de julio para “observar” cómo funciona el nuevo sistema. El tribunal es el encargado de la fiscalización, control y organización de las elecciones porteñas.

Antes de empezar la reunión,  los apoderados, junto a jueces y periodistas que estaban en el auditorio del STJ, en el edificio del Cerrito al 700, probaron ocho de las máquinas que se usarán en los comicios de julio.

La audiencia empezó con el  sorteo público para determinar el orden de los espacios que ocuparán en los “afiches de exhibición de las listas completas” que serán impresos en papel y colocados en cada uno de los lugares de votación. Durante los últimos días, las agrupaciones fueron presentando ante el tribunal en soporte digital siglas, logos y fotos de los candidatos para ultimar los detalles del sistema.

Luis Lozano, presidente del TSJ, se refirió a la auditoria que días atrás elaboró la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) sobre el sistema de voto electrónico y dijo que el “sistema cumplió satisfactoriamente con todas las exigencias”. A nivel general no hubo observaciones desde los apoderados de los partidos.

Sin máquinas para capacitar fiscales

La única objeción que surgió la planteo el apoderado de ECO (Energía Ciudadana Organizada), Luis Genoud, quien explicó que el gobierno de la Ciudad había prometido entregar máquinas a los partidos para capacitar a los fiscales,  pero que nunca llegaron. “Nos informaron que no las vamos a tener y creemos en la palabra empeñada”, dijo el apoderado a los jueces y agregó: “Ellos no son los dueños de los comicios”.

Se trata de unas 65 máquinas prometidas para capacitación. Lozano respondió que “este no es el lugar para hacer ese reclamo”, aunque dijo: “Vamos a hacer los esfuerzos para que los fiscales hagan bien su trabajo”.

“El sistema se presta al fraude”

Infojus Noticias habló con Beatriz Busaniche, de Fundación Vía Libre, sobre el sistema contratado por el Poder Ejecutivo de la Ciudad para las elecciones y todo lo que ronda el voto electrónico en capital.  La especialista explicó que no está ajustado a derecho y no cumple con los requisitos del artículo 24 de la ley. Señaló que no tiene accesibilidad óptima y que se presta al fraude. Añadió además que “no fue aprobado por la Legislatura como debe ser”.

Busaniche también se refirió a los problemas en la capacitación a los ciudadanos y a los propios fiscales: ““La gran mayoría de los fiscales no sabe cómo se usa la máquina”, concluyó.

Informe de auditoria

El Poder Ejecutivo de la Ciudad contrató a la empresa Magic Solutions Argentina (MSA) en una licitación realizada el año pasado por 245 millones de pesos en base a un diseño de la empresa, única poseedora de la patente del mecanismo digital. MSA es la misma que realizó las elecciones en Salta, la primera provincia que utilizó el voto electrónico.

El lunes pasado el tribunal recibió un informe de avance con “información parcial” sobre la auditoria que está realizando la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) sobre el sistema de voto electrónico.

El informe destaca que “hasta el momento no se han detectado problemas graves, ni indicios de que las observaciones que se describen” en el informe “puedan causar inconvenientes insalvables en el día de la elección”. Allí también se destaca que “los principales auditores de los comicios siguen siendo tanto los fiscales de las agrupaciones políticas, como los mismos electores”.

La auditoría está firmada por Claudio Righetti del departamento de computación de la UBA, pero que en su Twitter personal (@nijuch) especifica que trabaja para Cablevisión SA.

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