El ex juez de la Corte Suprema, Raúl Eugenio Zaffaroni, dijo que en la denuncia del fiscal Alberto Nisman no sólo no hay pruebas sino que no hay delito porque “lo punible empieza con el comienzo de ejecución de un hecho”. Para el penalista puede haber pasado que “le hayan dado pistas y datos falsos”.
“No sería la primera vez que alguien levante pistas faltas”, dijo esta mañana el ex juez de la Corte Suprema de Justicia Raúl Eugenio Zaffaroni en diálogo con Víctor Hugo Morales en Radio Continental sobre el supuesto “plan delictivo” para dotar de impunidad a los imputados de nacionalidad iraní acusados por el atentado de la AMIA, que denunció el fallecido fiscal especial para la causa, Alberto Nisman.
Si bien aseguró que no leyó las 289 carillas que se dieron a conocer ayer, dijo: “lo que está denunciando no es un delito, no veo tentativa ni comienzo de ejecución en lo que se describe. Aún probado lo que dice Nisman (en su denuncia), desde el derecho de fondo no hay delito”. “Acá hay una cuestión de pruebas, si menganito habló con sutanito, pero lamentablemente lo punible empieza con el comienzo de ejecución de un hecho. Incluso, si se probara lo que dice Nisman, desde el derecho no hay delito”, opinó. Y advirtió que el análisis que hay que hacer corresponde a “derecho penal de primer año”
Para el ex juez de la Corte puede haber pasado que “le hayan dado pistas y datos falsos” a Nisman, que “de buena fe” el fiscal creyó. “Este muchacho no es la primera víctima de pistas falsas, creo que ha habido otras”, dijo. Y agregó que “en algún momento el fiscal “se tuvo que dar cuenta de que le dieron pistas falsas y material no válido”.
“Si quiso encubrirse a alguien, el acuerdo con Irán es un comienzo de ejecución de un encubrimiento, una tentativa, porque el hecho no está consumado”, señaló Zaffaroni. Además aportó que “incluso en el caso de que forzando se dijese que es un hecho de tentativa, el memorándum de (Héctor) Timerman (con Irán) lo convierte en un desestimiento, y eso es impune también”.
Zaffaroni reconoció que la conducta del fiscal fue “extraña” y “poco usual”. “Este muchacho interrumpe un viaje de manera abrupta. Nadie interrumpe un viaje abruptamente en medio de una feria para presentar un escrito”, analizó.
En la entrevista también habló sobre la cobertura mediática y la causa que investiga la muerte de Nisman. Cuestionó la importancia que se daba a la prueba de parafina para determinar si había, o no, pólvora en la mano del juez, que habría sido la que disparó el arma calibre 22 sobre su sien derecha, que terminó con su vida. “Es contundente si es positiva, pero si es negativa no significa nada. En muchos casos, los testigos aseguran que el individuo disparó y, sin embargo, la prueba da negativa, y eso depende de muchas circunstancias”, dijo.