Se trata de Marcos Ledesma, que daba clases de música en el Jardín 914, de La Plata. La investigación comenzó en septiembre de 2013 y ahora el fiscal Álvaro Garganta lo imputó por el abuso sexual agravado por el daño a la salud mental de las víctimas y su condición de educador. Ledesma gozaba de eximición de prisión pero la Cámara de Apelaciones de la capital provincial revocó la medida.
Un maestro de música de un jardín de infantes está siendo buscado por la justicia penal platense, después de que la policía de investigaciones no lo encontrara en los lugares donde había fijado su domicilio y en las casas de sus familiares y allegados. Marcos Ledesma, de 36 años, está acusado de cometer once abusos sexuales a alumnos de 4 años en el Jardín 914, ubicado en las calles 42 y 22 de La Plata, donde daba clases de música.
El fiscal Álvaro Garganta, que lleva la investigación desde septiembre de 2013 –cuando los padres de varios niños lo denunciaron ante la Justicia–, lo imputó por delitos gravísimos: “Abuso sexual agravado por el grave daño a la salud mental que le ha ocasionado a sus víctimas, en concurso real con corrupción de menores agravada por su condición de educador, todos ellos en concurso entre sí”.
“Esta calificación tendría una pena en expectativa de 360 años, aunque nunca puede superar los 50”, dijo al diario El Día Matías Pietra Sanz, el abogado que patrocina a los padres. Para intentar probar un delito silencioso, que muchas veces no deja rastros, Garganta colectó como indicios los dibujos de los niños que habrían sido abusados, un biombo y hasta “grabaciones caseras” que hicieron los padres de los chicos, en las que los nenes relatan los presuntos ataques.
El docente, que tiene una pareja y un hijo y ya había sido apartado preventivamente del cargo, estaba libre por una eximición de prisión y un habeas corpus, pero el 30 de diciembre la sala II de la Cámara de Apelaciones de la capital provincial revocó la medida, después de reconocer once casos en lugar de los cuatro denunciados la primera vez.