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Luego de la renuncia del juez del Tribunal Superior de Justicia provincial, Ricardo Franco, el Poder Judicial de Chaco atraviesa otro escándalo. Denunciaron a una funcionaria por corrupción.  La denuncia la había hecho el titular de la Dirección de Defensa de la Democracia y el Ciudadano, Julio García. Se montó un operativo para frenar el delito, pero que permitió filmar a la imputada en el momento en que recibía un sobre de manos de un hombre. Aparentemente, el monto del soborno sería de 5.000 pesos y tenía por finalidad acelerar un expediente de un sindicato. 

La investigación estuvo a cargo de la Procuración y ayer confirmaron la denuncia en una conferencia de prensa en la que estuvieron presentes el secretario de Seguridad Pública Javier Oteo, el procurador general adjunto Hugo Fonteina, el comisario general Ramón Alegre y efectivos de la división de Drogas Peligrosas. Los funcionarios evitaron dar a conocer el nombre de la imputada, pero agradecieron el “coraje” que tuvo Julio García al realizar la denuncia.

La mujer fue detenida en el momento, y la liberaron después que se pudiera reunir con su abogada personal. Está acusada del delito de “tráfico de influencia”, que conlleva una pena de entre uno y doce años de prisión, en el caso de que la conducta delictiva “estuviera destinada a hacer valer indebidamente una influencia ante un magistrado del Poder Judicial o del Ministerio Público.”

La Fiscalía en la que está implicada la mujer es la que depende de Roberto Villalba, el fiscal que está a cargo de las denuncias que hizo el juez de la corte provincial, Ricardo Franco. El magistrado acusó a su mujer de entrar a robar a su departamento personal y de “violencia doméstica”, y renunció la semana pasada. Atravesaba un proceso de juicio político.