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“La mataron. No sabemos quiénes ni cómo pero la única certeza es que la mataron”, dijo a Infojus Noticias Marcos Cella, abogado de Elizabeth Cantero. La mujer, de 34 años, hermanastra de Ariel Máximo “Guille” Cantero, líder de la banda de narcotraficantes Los Monos, murió el lunes tras una brutal golpiza en la Unidad Penal para Mujeres N° 5  de Rosario. El fiscal de la Unidad de Homicidios, Pablo Pinto, investiga la muerte de Cantero. Los peritos realizarán hoy una autopsia al cadáver.

Cella responsabiliza al Servicio Penitenciario de Santa Fe por la muerte de Cantero. “Ella entró viva y nunca salió. Porque se la devolvieron a la familia muerta”, dijo el abogado. Los peritos harán la autopsia al cuerpo de la mujer en el Instituto Médico Legal. Buscan conocer las causas de la muerte. El fiscal Pinto pidió que la intervención sea filmada y permitió que la familia de la mujer aportara un perito de parte para la necropsia.

Cantero estaba detenida desde el 26 de diciembre, en el marco de una causa en la que se la investigaba por maltrato familiar, caratulada como “lesiones leves”. Tras su muerte, el Ministerio de Seguridad provincial difundió un comunicado de prensa donde señalan que ella intentó “agredir a una menor, hija de una interna”. “En ese momento es cuando otras reclusas, al verla, se abalanzan sobre ella para impedir la agresión. Es allí cuando se produce una gresca en la que inmediatamente intervino personal penitenciario de la Unidad, resultando lesionados miembros del personal penitenciario”, dice la circular que difundieron a los medios.

Tras el ataque, la media hermana del líder de Los Monos fue internada en estado grave en el Hospital Centenario y luego trasladada al Eva Perón, de Granadero Baigorria. Antes de la medianoche del lunes, murió.

Cella desconfía de la versión oficial. Cantero, antes de morir, no pudo poner en palabras lo que pasó dentro del penal: estaba inconsciente cuando la hospitalizaron. “No sabemos si fue una golpiza, si la drogaron, si fueron las internas o qué. Eso es lo que va a determinar la investigación”, dijo el representante de la familia.

Presa por violencia familiar

La primera semana de enero, el juez Héctor Núñez Cartelle ordenó la prisión preventiva de Cantero por maltratar a sus hijas. La mujer había sido detenida el último 26 de diciembre, en una casa del barrio rosarino de Las Flores. Estaba acusada de golpear a las dos nenas: una beba de once meses y una de tres años. Los informes médicos y los relatos de los vecinos confirmaron el maltrato del que eran víctimas.

Tras la intervención de los policías del Comando Radioeléctrico, las hijas de la mujer fueron trasladadas al Hospital Víctor J. Vilela. Los médicos le diagnosticaron “síndrome del niño maltratado e intoxicación por drogas” y quedaron, en principio, al resguardo de la Secretaría de la Niñez. Luego, fueron restituidas a sus respectivos padres, dado que cada una de ellas tiene un progenitor distinto. Mientras tanto, el organismo de Niñez monitorea la revinculación.

Desde un primer momento, Cantero y su abogado plantearon otra versión de los hechos. Para ellos, no hubo maltrato contra las nenas. También apuntaron contra los policías y plantearon que Cantero fue víctima de violencia institucional durante su detención. Esta otra denuncia quedó radicada en la oficina de Violencia y Corrupción Policial, a cargo de Karina Bartocci. “Mi nena se estaba ahogando con una pastilla que le saqué de la boca y ella vomitó; como me la querían sacar yo la tironeaba. Me llevaron al destacamento, me esposaron, me hicieron arrodillar y me pegaron”, había dicho Cantero en una de las audiencias.