Tres de ellos ya fueron recapturados. Podrían ser trasladados al penal de General Roca
El trabajo fue minucioso y planificado: hace una semana limaron los barrotes y las mallas de la sala del taller. Ayer a la tarde, después de traspasar ese primer obstáculo, seis presos que cumplían condena en la Unidad Penal 5 de Cipolletti, en Río Negro, cortaron el cerco perimetral de la cárcel y huyeron. Afuera los esperaba un auto: no todos llegaron a subir. A uno de ellos lo encontraron escondido entre los pastizales. Otros dos fueron recapturados unas horas más tarde.
El penal, levantado en el paraje El Treinta, en el Alto Valle de Río Negro, fue inaugurado tres años atrás. Según explicó una fuente judicial, no es una cárcel de máxima seguridad, aunque se aloja a “personas peligrosas” y con “condenas importantes”. Ayer a la tarde, seis de esos reclusos lograron escapar.
Tres de ellos fueron recapturados a las pocas horas. A Cristian Valdebenito lo encontraron cerca de la cárcel, escondido entre los pastizales. Rubén Barragán fue apresado en la zona de Puente 83. Roberto Melo cayó poco después: un policía lo identificó a bordo de un colectivo a altura de la localidad de Allen.
Anoche la policía aún buscaba a los prófugos, identificados como Enzo Parada, Cristian Pérez y Bruno Silva. Parada cumplía una pena de diez años por el homicidio de Johnatan Martínez en agosto de 2011. Cuando lo condenaron aún era menor. Se le impuso un tratamiento tutelar hasta cumplir la mayoría de edad y después lo enviaron al Penal 5. Pérez fue detenido en 2012. Lo condenaron a cinco años por robo calificado. Aún debía afrontar un juicio por otros robos. Silva cumplía una condena a nueve años por varios delitos. En varias oportunidades se fugó de los institutos en los que estuvo detenido siendo menor.
Autoridades del Penal 5 indicaron que los recapturados podrían ser trasladados al penal 2 de Roca.