La joven es hija de Héctor Carlos Baratti y Elena De la Cuadra. Ambos fueron detenidos en la Comisaría Quinta de La Plata. Se supone que Elena fue llevada luego al centro clandestino de detención Pozo de Quilmes. Es la nieta de Alicia, una de las fundadoras de Abuelas.
Ana Libertad es la nieta 115 recuperada por Abuelas de Plaza de Mayo. Es la hija la hija de Héctor Carlos Baratti y Elena De la Cuadra y nieta de Alicia Zubasnabar de De la Cuadra, una de las fundadoras del organismo y la primera presidenta. Este año, a pedido de la Justicia Federal, Ana se hizo el análisis de sangre y el Banco Nacional de Datos Genéticos pudo confirmar quienes eran sus padres. Así lo informó esta tarde la titular de Abuelas, Estela de Carlotto. Los padres de Ana Libertad, como la llamó su mamá, fueron detenidos en la Comisaría Quinta de La Plata. Elena parió allí y luego fue llevada al centro clandestino de detención Pozo de Quilmes.
“Se trata de la nieta de Alicia, una de las fundadoras de la Asociación que lamentablemente falleció”, dijo Estela al abrir la conferencia de prensa convocada en la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y subrayó: "Licha De la Cuadra buscó a su nieta hasta el día de su muerte. Toda la familia la ha buscado mucho y esta chica se va a encontrar con una familia muy linda".
Elena, que estaba embarazada de cinco meses, fue secuestrada junto a su pareja, Héctor. Por testimonios de sobrevivientes, se pudo saber que, el 16 de junio de 1977, dio a luz en cautiverio y que llamó a su hija Ana Libertad.
En 2010, Abuelas y la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) recibieron una denuncia con información sobre una joven que podría ser hija de desaparecidos. Luego de una investigación documental, el 26 de febrero de 2013, el caso fue remitido por la Conadi a la Unidad Especializada en Casos de Apropiación de Niños durante el Terrorismo de Estado, de la Procuración General de la Nación, que encabeza Pablo Parenti.
Esta Unidad, creada en 2012 a instancias de Abuelas, realizó una investigación preliminar que en agosto de 2013 fue enviada a un juzgado federal, solicitando la extracción de sangre. Desde el tribunal citaron a Ana y ella se hizo la extracción de sangre, que realizó el consulado argentino del país donde vive.
La extracción se hizo el 25 de abril pasado y la muestra llegó el 8 de mayo a la Argentina. Fue recibida por la Dirección de Derechos Humanos de la Cancillería. Este organismo la remitió al Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) para efectivizar el estudio.
El Banco informó ayer al juzgado que la joven es hija de Héctor Baratti y Elena De la Cuadra. Se preservan los datos de la causa y del juzgado para evitar que trascienda información que podría dañar la privacidad de esta víctima de apropiación.
“Destacamos que este es el primer caso investigado por la Unidad especializada en apropiación que finaliza con la restitución de identidad de una de nuestras nietas. Además, evidencia la coordinación de distintos organismos del Estado que trabajaron mancomunadamente para la resolución de este delito de lesa humanidad”, dijo Carlotto.
Según anticipó la titular de Abuelas, los apropiadores son civiles y anotaron a la chica como hija propia. Ese tema está siendo investigado por el juzgado federal.
“Es inmensa la felicidad que nos produce comunicar la restitución de otra nieta a tan pocos días de la última. Agradecemos a todos aquellos que se hacen eco de esta noticia y reiteramos la importancia que significa para el proceso de restitución, el trabajo responsable de los medios, respetando la intimidad de las víctimas y los datos sensibles para que las investigaciones judiciales lleguen a buen puerto. Elena y Héctor llamaron a su hija Ana Libertad. Hoy ella logró adquirir ese bien tan preciado que sus padres le desearon con su nombre: bienvenida Ana a tu libertad”, señaló Abuelas en un comunicado.
Esta nueva restitución se produce a 17 días de la restitución de identidad de Ignacio Guido Montoya Carlotto, hijo de Laura Carlotto y Walmir Montoya y nieto de la presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto. Ignacio Guido se había acercado a Abuelas en junio de este año. “Con inmensa alegría, Abuelas informa la restitución “Quiero decir gracias a todos, gracias a Dios, gracias a la vida. Porque lo que yo quería era no morirme sin abrazarlo y pronto lo voy a poder abrazar”, expresó Estela en aquel momento. "Que alegría recibir la noticia del hallazgo del nieto 115!", tuiteó Ignacio Guido esta tarde.
“La foto de Messi provocó una catarata de llamados. Quién te dice que en 15 días no tenemos otra conferencia de prensa”, se entusiasmaba Abel Madariaga, secretario de Abuelas, que hace tres años recuperó a su hijo, Francisco, que es un calco delgado y tatuado de Abel.