Fue pareja de Walsh y colaboró con él en la difusión de la Carta Abierta a la Junta Militar haciendo copias en la casa que compartían en San Vicente. Tenía 71 años y padecía una enfermedad terminal. Lilia trabajó en los diarios La Opinión y Página 12 y en los útlimos años se desempeño en la Secretaría de Derechos Humanos.
La periodista Lilia Ferreyra, pareja del escritor Rodolfo Walsh cuando en marzo de 1977 este escribió y difundió su célebre Carta Abierta a la Junta Militar, falleció hoy a los 71 años en esta capital, víctima de una enfermedad terminal. Había trabajado en los diarios La Opinión y Página/12 y en los últimos años se desempeñó en la ex ESMA, el lugar donde fue llevado Walsh tras ser asesinado en la calle mientras despachaba por correo su denuncia en la que Lilia había colaborado, haciendo copias en una casa que compartían en la localidad bonaerense de San Vicente.
Desde ese momento, Lilia comenzó una lucha incansable por llegar a obtener justicia por el crimen de su compañero, como así también por todos los crímenes de la dictadura, y fue integrante del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). En ese camino, en el año 2010 Lilia declaró como testigo en la causa ESMA, juicio en el que fueron condenados los responsables de la desaparición de Rodolfo Walsh.
Con el impulso dado desde el 2003 por el gobierno nacional a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, Lilia comenzó a trabajar en la Secretaría de Derechos Humanos. Primero –durante la gestión del entonces Secretario Eduardo Luis Duhalde- fue la representante del Estado nacional en el Ente Público tripartito que administra el Espacio Memoria y Derechos Humanos (ex ESMA), y durante los últimos años fue asesora del secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda, en investigaciones y publicaciones.
El secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda, expresó: “Su ejemplo quedará en la memoria de todos los argentinos. Y seguramente se reencontrará con Rodolfo para descansar en paz”.
El velatorio se llevará a cabo a partir de las 21:00 hasta las 11:00 de mañana en la Sala Cortázar de la Biblioteca Nacional (Agüero 2502, CABA), y luego será llevada a su ciudad natal, Junín, provincia de Buenos Aires, donde descansarán sus restos.