Completó mal los datos y la procesaron por falsificación de documentos. La Cámara revocó la decisión y ordenó al juez que rectifique las partidas.
Antonia es paraguaya. En octubre de 2006 inició los trámites para radicarse en el país de forma definitiva. Al completar las planillas, registró el número de DNI de su hijo, donde debería haber ido el propio. La mujer se acercó al Registro de Migraciones para notificar el error y revocó el procesamiento. A pesar de ello, el error dio lugar a una serie de investigaciones que culminaron con la imputación de “uso de documento ideológicamente falso”. El juez de primera instancia decidió procesarla. Ahora, la Sala I de la Cámara Criminal y Correccional Federal la sobreseyó.
La defensa de Antonia apeló el procesamiento, argumentando que no hubo intención de cometer el delito ya que ella “desconocía la falsedad del certificado.” Al respecto, la Cámara resaltó que Antonia fue quien puso en conocimiento de las autoridades esta situación, al acercarse al programa “Patria Grande”, con el objeto, justamente, de regularizar su situación migratoria.
En su resolución, la Cámara resalta que el objetivo de la nueva política de integración del programa Patria Grande es la “protección del extranjero y su inclusión al sistema legal y de derechos” a través de la simplificación de los trámites, con lo cual corresponde adoptar un “temperamento liberatorio” respecto de estos casos.
Finalmente consideró que la imputada había obrado de buena fe y decidió su sobreseimiento por inexistencia de dolo (intensión de dañar). Además, ordenó al juez de primera instancia que arbitre los medios necesarios para rectificar la documentación de Antonia.