Infojus Noticias

Susana Trimarco recibió hoy el título Honoris Causa de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Acompañada del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez y el rector de la UBA, Rubén Hallú, la mamá de Marita Verón agradeció a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por el proyecto de democratización de la Justicia. “Los jueces se creen reyes: no pagan impuestos y ocupan el cargo hasta que se mueren. Y nosotras las madres no tenemos justicia”, dijo.

La primera vez que la Presidenta planteó públicamente la necesidad de una reforma judicial fue en diciembre pasado. Un tribunal tucumano acababa de absolver a los trece acusados por el secuestro y desaparición de Marita Verón. El fallo generó el repudio de amplios sectores de la sociedad y marchas en todo el país. Cuatro meses después, el Congreso de la Nación debate seis proyectos de reforma.

“Lo digo así, a los gritos: apoyo totalmente, de todo corazón, a la presidenta por la democratización de la Justicia”, dijo Trimarco. La mujer contó que habló con la presidenta “de mamá a mamá”. “Conocí en ella a una madraza con mucha sensibilidad humana. Nosotros con Mica (su nieta) la adoramos” dijo.

Durante la conferencia de prensa, Trimarco criticó a los jueces y a los fiscales “que se quedan en sus oficinas con aire acondicionado” y no investigan, y pidió que la Justicia se involucre directamente en la lucha contra las redes de trata. “Está muy bien todo lo que hacemos de rescatar a la víctima y darles contención, pero falta una cosita: el proxeneta tiene que ser detenido, juzgado y castigado”, reclamó. Y agregó: “se tienen que desarticular estas redes. Qué remediamos recuperando a las chicas si los tipos en la calle siguen haciendo lo mismo”.

Trimarco llegó hasta la sede de Arenales de la UBA acompañada de su hijo y su nieta –hija de Marita- Micaela Verón. “No sé qué hace acá, tendría que estar en el colegio”, dijo entre risas. Su mamá, María de los Ángeles Verón, Marita, está desaparecida desde 2002. Durante más de diez años, Trimarco buscó a su hija a través de la Fundación María de los Ángeles, que ella misma creo. Si bien nunca pudo encontrarla, logró rescatar a decenas de jóvenes víctimas de la trata con fines de explotación sexual. En diciembre del año pasado, en la causa por el secuestro de Marita, la Sala II de la Cámara en lo Penal de Tucumán absolvió a los trece acusados. Trimarco apeló la medida y pidió el juicio político a los jueces Emilio Herrera Molina, Alberto Piedrabuena y Eduardo Romero Lascan.

Después del acto en el que recibió el reconocimiento de la UBA, Trimarco respondió preguntas de los periodistas. Lo hizo sentada. Según explicó, porque desde hace unos diez años tiene presión alta. “El médico me dijo que pare y que no hable tanto. Tengo un cuadro de estrés grave”, dijo. La conferencia de prensa, que sus asesores pidieron que fuera breve, se extendió más de media hora. Terminó cuando llegó su nieta. “Me viene a saludar porque se va”, dijo Trimarco. “No, te vengo a decir que cortes”, le contestó la adolescente.