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Carlos Pedro Blaquier, presidente del ingenio Ledesma, está más cerca de enfrentar otro juicio oral por su participación en crímenes de lesa humanidad en el marco de la causa “Burgos” que investiga la Noche del Apagón: una serie de secuestros llevados a cabo en las últimas horas del 20 y la madrugada del 21 de julio de 1976. La Cámara Federal de Salta ratificó que existen pruebas suficientes de que la empresa Ledesma colaboró con el secuestro de sus trabajadores para desarmar la organización sindical.  "Les ataron las manos y les vendaron los ojos, los identificaron con un número, los subieron a diferentes móviles y los llevaron indistintamente a las comisarías de Calilegua, Libertador General San Martín y/o del Ingenio Ledesma, lugares en donde fueron recogidos otros detenidos y reagrupados en diferentes vehículos para su posterior traslado", relatan los jueces del tribunal salteño en el fallo que confirmó el procesamiento de Blaquier y Lemos, una de las causas en las que se investiga la complicidad civil con el terrorismo de Estado.

La Cámara Federal de Salta confirmó el procesamiento de Blaquier como “partícipe necesario” en veinte casos de privación ilegítima de la libertad agravada y también ratificó el procesamiento de Alberto Lemos, administrador del ingenio, como “partícipe secundario” de los secuestros.

La Noche del Apagón ocurrió en Jujuy entre el 20 y 21 de julio de 1976. Cuatrocientas personas fueron secuestradas entre las últimas horas del 20 y la madrugada del siguiente, 55 permanecen desaparecidas. Las víctimas fueron secuestradas de sus domicilios particulares en Calilegua y en Villa General San Martín. La complicidad de la empresa Ledesma con el procedimiento fue denunciada en el informe de la Conadep y por numerosos organismos de Derechos Humanos. Recién en abril de 2012 la justicia avanzó en el procesamiento de Blaquier.

El procesamiento del dueño de la empresa azucarera y papelera Ledesma pasó varias instancias judiciales hasta llegar a la Cámara Federal de Salta, que ahora consideró que está suficientemente documentado que los secuestros se hicieron con camionetas y vehículos de su propiedad. Los "indicios, pruebas testimoniales y documental, resultan concordantes y coherentes en el sentido de la existencia e intervención de las camionetas y otros vehículos de la empresa Ledesma SAAII, en las detenciones ocurridas entre los días 20 y 21 de julio (...) para lo que la colaboración resultaba indispensable", afirma la resolución.

Los camaristas también dan por probado que esta colaboración no fue improvisada en el momento sino que existió una coordinación previa, y que Blaquier y Lemos eran absolutamente conscientes de lo que estaban haciendo. "La labor de detención planificada y simultánea en aquella noche y madrugada de julio de 1976 por parte de las fuerzas que la encabezaron y desarrollaron, no pudo coordinarse sino con antelación. Es decir, el uso de las camionetas y trailers de la empresa no pudo ser sorpresivamente requerido y decidido el mismo 20 de julio y con el absoluto desconocimiento de los responsables o administrador de la empresa", sostienen en su resolución.

La fiscalía y las querellas pidieron que Blaquier y Lemos también fueran procesados por 24 violaciones de domicilio, 27 privaciones ilegales de la libertad agravadas, 33 hechos de tormentos y 6 hechos de homicidio. Dos de los tres jueces del tribunal -Jorge Luis Villada y Roberto Loutayf Ranea- votaron ratificar el procesamiento de Blaquier como partícipe necesario de la privación de la libertad de veinte víctimas y de Lemos como partícipe secundario pero dictarles la falta de mérito en todos los otros delitos de lesa humanidad.

El juez Federico Díaz votó en disidencia. Su posición era dar lugar al recurso que habían presentado las querellas y la fiscalía. Díaz sostiene -en su voto en disidencia- que los imputados también son responsables de la violación de domicilio en 17 hechos y de 13 hechos de tormentos agravados y 7 casos de tormentos simples. En el fallo de la Cámara, Díaz votó por detener a Blaquier y a Lemos y dictarles la prisión preventiva. Su voto fue minoritario, por eso Blaquier y Lemos aguardarán el juicio en libertad.

El voto minoritario de Díaz sostiene que los dos imputados desarticularon el trabajo de organización sindical que se venía gestando dentro del ingenio y que de esa manera se “ahuyentó la posibilidad de reclamo alguno de los empleados frente al temor de correr la misma suerte”. Dina Cardozo, sobrina de Avelino Bazán, el dirigente sindical desaparecido en 1977, e integrante de los organismos de Derechos Humanos de Jujuy, dijo a Infojus Noticias: “Es importante que se siga haciendo justicia pero algunos pasos son bastante débiles. Que se lo juzgue es alentador pero a la vez no se lo procesa por las torturas cuando es claro que el facilitó el camino para que fueran posibles y que además se enriqueció con todo lo que pasó. Fue el ideólogo y consolidó su posición económica, su papel es bastante significativo para nosotros”.

El 3 de abril de 2014 comenzará uno de los juicios contra Blaquier y Lemos por el traslado desde Jujuy a Mar del Plata en un avión de varios de los detenidos durante La Noche del Apagón, entre ellos Luis Ramón Aredez, intendente de Libertad General San Martín, Omar Claudio Gainza y Carlos Alberto Melián.