Consultados Por Infojus Noticias, destacaron que pasar del sistema de inquisitivo al acusatorio permitirá tener una real división de funciones y responsabilidades. Además, señalaron que la oralidad en las resoluciones terminará con las decisiones crípticas y acelerará los procesos.
Abogados, fiscales y defensores destacaron la “modernización del sistema” judicial que llegaría con la reforma del Código Procesal Penal que el Poder Ejecutivo envió al Congreso. Señalaron también los beneficios de la “distribución” de poder y responsabilidades entre jueces y fiscales, que se producirá al cambiar del actual sistema inquisitivo al acusatorio.
“Esta reforma es la posibilidad de modernizar el sistema. Los roles están más claros y las responsabilidades también”, indicó titular de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), Félix Crous, y aclaró: “El juez hará de juez y no manejará ya los tiempos de la investigación, y el que debe manejar los tiempos debe rendir cuentas por eso, que somos los fiscales”.
El proyecto de reforma que ingresó al Senado contempla el cambio del sistema inquisitorio, donde el proceso lo dirige el juez, al acusatorio, donde el fiscal es el encargado de la investigación. Además, en la nueva iniciativa, las víctimas podrán participar del proceso junto al fiscal y se incorporan los principios de celeridad, oralidad, publicidad y “desformalización” de las decisiones.
Crous dijo que “a veces los jueces concentran tanto poder en sí mismo” que terminan siendo “constructores de impunidad sentándose arriba de las causas” porque su figura estaba relacionada a la de “un funcionario todopoderoso que reunía las pruebas y decidía el mérito de esas pruebas reunidas”.
El fiscal hizo un repaso por los intentos fallidos de reformas que hubo durante diferentes gobiernos, mencionó la importancia de los producidos por la academia y las experiencias que algunas provincias vienen teniendo. “Esta reforma viene a sintetizar todo eso”, dijo Crous y agregó que con este cambio en aplicación, los juzgamientos pueden ganar en “velocidad y calidad”.
En la misma línea, el defensor oficial Manuel Bouchoux destacó los beneficios de “dividir el proceso penal” porque permite “la división de poder entre fiscal y juez también implica división de responsabilidades”.
“Yo trabajo con el código procesal de la provincia, que va en ese sentido, y es beneficioso. Lo importante es que hay división de funciones y de responsabilidades”, agregó Bouchoux y ponderó la inclusión de la decisión oral, que “servirá para darle celeridad a los procesos, para convertirlos en una cosa pública y para terminar con las resoluciones crípticas del actual sistema”.
Por su parte, el especialista en derecho penal Martin De la Canal también destacó la “celeridad” de los procesos. “Lo vemos en la provincia de Buenos Aires donde las causas se resuelven mucho más rápido”, señaló De la Canal, que integra la Asociación Pensamiento Penal.
Para la fiscal Cristina Caamaño con reforma de Código Procesal Penal, "los roles en el proceso están mucho más claros”. Sostuvo que el nuevo sistema acusatorio “va a imponer oralidad” y que esto garantizará audiencias públicas donde vamos a poder ver la actuación del juez y del fiscal”.
Caamaño señaló también que “esto va a acercar a los ciudadanos a los hechos” ya que “mucha gente hoy opina sin saber bien de que se trata, repitiendo lo que dicen los medios”.
En declaraciones a Radio Nacional, la abogada hizo referencia al lugar que se le da a la víctima en el sistema actual “siempre estuvieron relegadas las víctimas y los familiares”, por esa razón mencionó dos áreas que intentan menguar esta falla en la actualidad “como lo son la Dirección de Orientación, Acompañamiento y Protección a Víctimas (DOVIC) y Programa de Acceso Comunitario a la Justicia (ATAJO) que ya están acompañando, explicándole las causas a la gente, poniéndolos en conocimiento de sus derechos” y aseguró que "en el marco de un sistema acusatorio la víctima tendría protagonismo conjuntamente con el fiscal”.
El presidente del Colegio de Abogados de Santa Fe, Eduardo Massot, consideró que "en relación al nuevo Código Procesal Penal, el paso a un sistema acusatorio es bienvenido".
Esta reforma tiene algunas similitudes al sistema penal que se implementó desde el 10 de febrero en Santa Fe", añadió Massot en diálogo con radio Universidad, de Santa Fe.
El juez de Tribunal Oral en lo Criminal 15, Adrián Martín, también valoró los cambios previstos en el proyecto de reforma del Código Procesal Penal y sostuvo que la iniciativa recoge "el reclamo" del Poder Judicial por una herramienta que posibilite un accionar "más ágil y más transparente" de la Justicia.
En diálogo con Télam, el magistrado, que además es titular de la Asociación Pensamiento Penal, sostuvo que se está "en inmejorables condiciones" para avanzar en el reemplazo de un Código de procedimiento "que nació viejo y caduco", arribando a una normativa "parecida a la que ya poseen las provincias".
Sobre la celeridad de los procesos, dijo que si bien "no es un valor en si mismo que se lleve a cabo un juicio en 10 horas" la nueva estructura, donde el fiscal se encarga de la investigación, pasa a ser "una preparación rápida para llegar a un juicio".
Por último dijo que la actual estructura alienta la sensación de que el juicio se hace "para convalidar lo que se hizo antes en la instrucción".
En el mismo sentido, el vicepresidente del Instituto Nacional de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), Alberto Binder, sostuvo que la reforma es una “medida que se venía pidiendo hace más de 20 años” y que será una “herramienta para afrontar la criminalidad en serio”.
El especialista manifestó que la “modernización” es “tan importante” que “de hecho existen proyectos de todos los partidos políticos al respecto”.
“Se tratará de un paso esencial y muy significativo para enfrentar el delito y terminar así con las herramientas obsoletas actuales”, aseveró.
El fiscal General de la Cámara Nacional de Apelaciones, Ricardo Sáenz, consideró una “buena señal” la reforma para pasar de un sistema inquisitorio a uno acusatorio, y resaltó la “importancia de la independencia de los fiscales”.
Para Sáenz, “la clave de la reforma es ir hacia un sistema más moderno” donde se garantice la “independencia de los fiscales”, dijo en declaraciones a Radio Mitre.
El abogado integrante del área de Justicia y Derechos Humanos de la Fundación Pensar, Martín Casares, afirmó que "los sistemas acusatorios acortan los plazos" de resolución de causas judiciales, aunque señaló que es muy importante que “la reforma (del Código Procesal Penal) venga acompañada con cambios en las estructuras y en las prácticas judiciales” para que “no se disuelva su impacto”.
Casares subrayó la importancia de que, a partir del cambio, los “fiscales centren sus energías y capacitación en conseguir pruebas para plantearlas en el marco de una audiencia oral”, fomentando la formación de “equipos de investigación”.