El auditor porteño Eduardo Epszteyn había realizado un relevamiento por cuenta propia previo a la inauguración: registró sobreprecios de hasta un 159 por ciento entre las obras del Metrobús de la avenida 9 de Julio y del corredor sur.
Según un informe del auditor general porteño Eduardo Epszteyn las obras del Metrobús de la avenida 9 de Julio y el del Corredor Sur presentaron sobreprecios de hasta 159 por ciento. “Hay un nivel de sobreprecios escandalosos”, aseguró el auditor. Según su relevamiento, una viga para el Metrobús de Retiro hasta Constitución costó 2.262 pesos. En una obra similar pero para el trayecto Constitución-Puente La Noria cuesta 3.613. Desde el Gobierno porteño negaron irregularidades y replicaron: “si Epszteyn cree que hay una estafa, que vaya a la Justicia”.
La misma baldosa puede costar 179 pesos en una obra y 464 en otra, es decir, más del doble. “Todo esto tiene que ver con información que es pública y que nosotros solicitamos al ministerio correspondiente”, aseguró a Infojus Noticias Eduardo Epszteyn. “La Auditoría porteña releva las obras después de ejecutadas, pero por ser ésta una obra tan importante y emblemática, nosotros decidimos seguirla”, contó.
“Nos llama la atención que empresas que fueron descartadas en un caso a raíz de un fundamento técnico, son aceptadas en otra obra”, señala el auditor. Así ocurrió, según explica, con la empresa Rivas, que había sido descartada para la construcción del Metrobús de Juan B. Justo y después recibió la adjudicación de la de avenida 9 de Julio. Del Metrobús Corredor Sur se encarga la empresa Bricons.
“La contratación es opaca. Se hace una gran cantidad de contrataciones, muchas a raíz de contratos que la Ciudad ya tiene para mantenimiento”, planteó el auditor. “No licitaron toda la obra, sino que para algunas cosas usaron el dinero que la Ciudad tenía destinado para mantenimiento, semaforización, parques, etcétera.” Según Epszteyn , así ocurrió con la remoción de los árboles de la avenida 9 de Julio, que fue realizada como “mantenimiento” cuando se trataba de una obra nueva.
Desde la Subsecretaría de Transporte de la Ciudad aseguran que todas las empresas fueron contratadas mediante licitaciones públicas, y que se adjudicaron las obras al que ofertó el menor valor final. “¿Por qué hay diferencias de precios? Porque cada uno tiene acuerdos con proveedores distintos. A veces hacen acuerdos con un fabricante para que les venda más barato”, respondió Juan José Méndez, jefe de Gabinete de esa Subsecretaría.
“Algunos ítems como el botazo –paragolpe - son más caros en el corredor de la avenida 9 de Julio, 2.026 pesos, que en el Sur, 1.800 pesos. Los asientos con respaldo en el corredor de avenida 9 de Julio cuestan 3.850 y en el Sur 3.000, a la inversa de lo que dice Epszteyn”, replicó Méndez.
El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, inauguró las obras del Metrobús de la 9 de Julio hace dos meses. Si bien el Metrobús de la 9 de Julio se realizó con la idea de conectar la estación Retiro con la de Constitución -recorrido que ya hace la línea C de subte- las obras fueron desde la calle Arroyo hasta la avenida San Juan. “Se lanza una ejecución desmesurada sin tener un análisis o un proyecto completo. No son decisiones que tengan que ver con el planteamiento urbano ni con el transporte de la Ciudad, sino con la necesidad electoral de Macri”, afirmó el auditor. “Son todas obras que están basadas en marketing político”, afirmó el auditor. “Lo que estamos haciendo es pedir explicaciones, por un lado por los medios, y por el otro, yo mismo presenté un pedido de explicaciones, ya no como legislador sino como vecino”, explicó Epszteyn.