Nelson Acosta está acusado de disparar y herir con balas de plomo a dos periodistas y un manifestante, durante la represión por el desalojo de la Sala Alberdi del Centro Cultural San Martín, en marzo de 2013. Ya son tres los policías detenidos.
Un oficial de la policía metropolitana fue detenido por haber disparado con balas de plomo durante la represión frente al Centro cultural San Martín, en marzo de 2013, donde dos periodistas y un manifestante fueron heridos. Es el tercer detenido por el caso.
A Nelson Maximiliano Acosta lo apresaron el martes por la noche en el Regimiento de Patricios, acusado de triple intento de homicidio durante esa represión sobre la avenida Corrientes. Acosta está señalado como el autor de los disparos que hirieron a dos periodistas de la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA) que cubrían el conflicto con los manifestantes que defendían el espacio cultural. Acosta declaró ayer ante la jueza Wilma López y negó la acusación. Lo habían citado para la semana pasada, junto con dos compañeros, a prestar declaración indagatoria pero no se presentó, por lo que la jueza ordenó su captura.
La represión de la policía metropolitana contra los docentes y alumnos que resistían el desalojo de la sala Alberti, ubicada en el sexto piso del centro cultural, comenzó la tarde del 12 de marzo, cuando la Policía Metropolitana empezó a disparar con balas de goma, tiró gases lacrimógenos y usó camiones hidrantes.
Con el correr de las horas, la represión se extendió por la zona y, en la madrugada del 13, en la cuadra de Corrientes y Paraná, Germán De los Santos, Esteban Ruffa y Fumaroni fueron atacados con balas de plomo por dos grupos de la Metropolitana. Otras doce personas fueron heridas por balas de goma y palazos de los policías.
“Acosta habría dicho que se había ido de vacaciones al exterior del país”, aseguró al diario Página/12 María del Carmen Verdú, abogada de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) que defiende a Ruffa y de los Santos, los dos periodistas de la RNMA que fueron heridos con una bala. La detención de Acosta se sumó a las Gabriel Pereyra de la Rosa y Miguel Antonio Ledesma, los otros dos oficiales que quedaron detenidos el miércoles por orden de López, responsabilizados de herir a los tres hombres.
Verdú explicó que en su declaración ante López, Acosta sostuvo lo mismo que sus compañeros habían dicho la semana anterior.: “Los tres juraron que no usaron postas de plomo, lo cual queda desmentido por el allanamiento que hicieron en la casa de Pereyra de la Rosa después de su detención. Encontraron un arsenal de guerra de escopetas y armas cortas. Además, tenía 60 cajas de municiones donde había 50 proyectiles 9 milímetros, 54 bolitas de paint ball y 523 balas de calibre 223”. Los tres detenidos son parte de la División de Operaciones Especiales Metropolitanas (DOEM), un cuerpo especializado en tareas de alta complejidad.
Ruffa volvió a declarar y desmintió “los dichos de la policía. Todos niegan haber tirado balas de plomo. Ledesma, en particular, admite además que, cuando avanzaban los grupos de la Metropolitana por avenida Corrientes, hicieron un solo disparo con lista baja, es decir que tiraron al piso. Esteban Ruffa remarcó que vio bien claro cómo los policías dispararon varios tiros y al cuerpo de los manifestantes”, dijo Verdú. La jueza tiene diez días hábiles para resolver la situación procesal de los tres policías.