Las pruebas son las únicas que parecen hablar en el caso de Milton Ponce, el joven de 29 años que a fines de septiembre recibió un disparo en la cabeza y desde entonces permanece en estado de coma.
Las pericias confirmaron que la bala que impactó a Milton Ponce, de 29 años, provino del arma reglamentaria del oficial de la Policía Bonaerense, David Cabaleiro, que continúa sin declarar desde la balacera que se produjo en Villa Urquiza a fines del mes de septiembre. Los peritajes se realizaron sobre las armas de David Cabaleiro y su hermano José Luis, agente de la policía metropolitana y quien estaba con él cuando todo sucedió
Ambos están detenidos y se sospecha que el rol de José Luis es el de encubridor de su hermano. Desde el domingo 29 cuando se produjo el episodio que terminó con el disparo que dio en la cabeza de Ponce, los hermanos están detenidos por orden del juez Rodrigo Pagano Mata. David está acusado del delito de homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma de guerra. Hasta ahora siempre se negó a declarar. Las armas reglamentarias de ambos hermanos fueron peritadas. La pericia complicó aún más la situación de David Cabaleiro, quien ya fue reconocido por dos testigos.
Esa tarde
El hecho que se les imputa a los dos policías ocurrió frente a la Plaza Alberdi, en Machaín y Larralde, de Villa Urquiza, donde tres amigos, entre ellos Ponce, estaban recostados en un auto estacionado frente a un salón de fiestas.
"Estaciona un coche y en broma (Ponce) le dice `te cuidamos el coche, después nos das diez pesitos´. El hombre ni siquiera nos respondió y entró a la fiesta. Y a los diez o quince minutos, salen dos hombres insultándonos”
- Ustedes andan pidiendo plata, los acusó uno de ellos
- ¡Qué venís a hacerte el loco acá!, respondió Ponce
- Quédense tranquilos porque yo tengo un fierro
- Bueno, si tenés un fierro, sacalo y tirá, dijo uno de los jóvenes.
El hombre – que no se había identificado como policía, “baja a la vereda y me muestra el arma. Yo me cubro. Cuando miro de vuelta me seguía apuntando a la cabeza y le digo: `¡Eh, loco! ¡Pará, pará!´". Y cuando miro de vuelta ya me había pasado por atrás y escucho ¡pla! (por el disparo que hirió a su amigo)", indicó.
Luego de disparo, Marcelo y Diego (el otro joven que estaba ahí) cargaron a Ponce en el auto del primero y lo llevaron al Hospital Pirovano, donde sigue en estado de coma.