El fiscal Schapiro dijo que “es un delito que comprende cualquiera de los actos perpetrados con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”. En la causa hay 21 imputados por crímenes contra 147 víctimas.
El juicio oral y público por los crímenes de lesa humanidad cometidos en el centro clandestino de detención “La Cacha” continuó ayer con la etapa de alegatos. La fiscalía pidió que los imputados sean condenados por los delitos de genocidio, lesa humanidad y violación del derecho de gentes. El próximo miércoles, cuando se reanuden las audiencias, los fiscales concluirán el alegato con el pedido de penas para cada uno de los imputados.
Ayer el Tribunal Oral Federal N° 1 de La Plata continuó escuchando los alegatos del fiscal Hernán Schapiro, que adelantó el pedido de condena por genocidio a los imputados. Schapiro argumentó: “es un delito que comprende cualquiera de los actos perpetrados con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”. El fiscal explicó que esos actos “comprenden la matanza y lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo, sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial, además de medidas destinadas a impedir nacimientos en el seno del grupo o traslado por la fuerza de niños del grupo a otro grupo”.
El representante del Ministerio Público fiscal recordó que el concepto de genocidio “surgió en 1945 cuando se estableció el Estatuto del Tribunal de Núremberg y definió como el crimen contra la humanidad como el asesinato, exterminio, esclavitud, deportación y cualquier otro acto inhumano contra la población civil, o persecución por motivos religiosos, raciales o políticos, cuando dichos actos o persecuciones se hacen en conexión con cualquier crimen contra la paz o en cualquier crimen de guerra". En el caso de Argentina, Schapiro explicó que el genocidio se emprendió "contra un grupo que fue bien diferenciado por los agresores".
Entre los 21 acusados por los delitos en La Cacha hay policías, integrantes de las fuerzas armadas y civiles. Se juzgan los casos de 147 víctimas, y los asesinatos de Laura Carlotto y de Olga Noemí Casado. El CCD La Cacha estaba ubicado entre las calles 191, 196, 47 y 52 de la ciudad de La Plata, contiguo al penal de Olmos y en las antiguas instalaciones de Radio Provincia. Funcionó desde 1976 a 1978 y además operó como una maternidad clandestina para las detenidas que se encontraban embarazadas. El centro se denominó "La Cacha" ya que los represores se jactaban en decir: "Estás en La cacha, de Cachavacha, la bruja que desaparece gente", en referencia al personaje del dibujo animado Hijitus de Manuel García Ferré.