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En los últimos días el barrio de La Boca se convirtió en el epicentro de un desastre. La mañana del domingo uno de ellos consumió dos conventillos. Murieron dos hermanitos de 9 y 11 años,  y 11 familias quedaron sin techo. Hoy, cuando el barrio todavía intentaba reestablecer su calma, otras llamaradas terminaron con una vivienda de material, sobre el paseo Caminito, y cinco familias quedaron sin un lugar donde vivir. Fue en el contexto más desolador: cuando el barrio se preparaba para velar a los nenes fallecidos.
 

La bronca y la indignación que dejó el incendio de la calle Melo pueden verse en la mirada de los sobrevivientes. Perdieron todo lo poco que tenían. Acampados sobre la calle, esperan una respuesta del gobierno porteño. Hasta ahora, y de forma informal, trascendió que la oferta es de un pago inicial de 7200 pesos y siete cuotas de 1200. El acuerdo incluiría que deben mudarse de ahí. Los vecinos no quieren. Ellos aspiran a reconstruirse de entre las cenizas de ese lugar que los albergó y del que, al parecer, iban a ser desalojados en dos meses. Hasta ahora el gobierno de Mauricio Macri solo hizo efectivo la entrega de colchones y frazadas. Los habitantes de los conventillos pidieron baños químicos. Se arreglan con la solidaridad de los vecinos.

Hoy, cuando se enteraban del segundo incendio y se preparaban para despedir a Pitu y Pola, como todos conocían a los nenes fallecidos, un operativo de la policía metropolitana irrumpió a media cuadra del lugar en un supuesto operativo antidrogas. No son pocos los que creen que se trató de una maniobra de distracción.

Las columnas de humo que el domingo por la mañana marcaron el cielo porteño fueron el indicio de lo peor. Un incendio arrasó con dos conventillos del barrio de La Boca y dejó como saldo dos hermanitos fallecidos,  11 personas con heridas de diversa gravedad y 11 familias en la calle. Las personas que vivían en el lugar afirmaron que el incendio se inició de manera intencional y pidieron asistencia al  gobierno de la Ciudad. Hasta ahora solo recibieron ayuda de los vecinos.

El incendio comenzó cerca de las ocho de la mañana del domingo  en dos conventillos de la calle Carlos Melo al 500 (uno, en el 580 y el otro en el 586) entre avenida Pedro de Mendoza y Daniel Cerri. Hasta el lugar, ubicado a siete cuadras del paseo Caminito, llegaron ocho dotaciones de bomberos que controlaron las altas llamas en casi dos horas. Los hermanitos fallecidos tenían nueve y once años. Su mamá está internada, sus dos hermanas resultaron ilesas y su papá sufrió quemaduras en la cara y las manos. Todos vivían en el segundo piso de Melo 586. El día anterior, en la zona, se había realizado una protesta vinculada al tema de vivienda. Treinta familias están a punto de ser desalojadas de los conventillos donde viven y no obtienen respuesta por parte del gobierno de Mauricio Macri. 

Desamparo

El legislador Francisco `Tito´ Nenna, del Frente para la Victoria, explicó que 1600 familias de La Boca están en riesgo por las condiciones en las que se encuentran sus viviendas, "sin servicios mínimos". El legislador, que vive en el barrio, cuestionó al Ejecutivo porteño por haber hecho en sus siete años de gestión "un vaciamiento" del Instituto de la Vivienda de la Ciudad, y por no aplicar la ley 341, de cooperativas, que permite que "varias familias se junten para construir o refuncionalizar sus viviendas". También cuestionó al gobierno de Macri por haber bajado un 24 % la parte de presupuesto destinada a viviendas y denunció “subejecución” de la partida.