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La Sala I de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal, con las firmas de Eduardo Farah y Jorge Ballestero, apartó hoy al juez federal Norberto Oyarbide de la causa por el desvío de fondos de Sergio y Pablo Schoklender en la Fundación Madres de Plaza de Mayo. Además, anuló los procesamientos de los hermanos Schoklender.

En su resolución, los jueces criticaron duramente la actuación de Oyarbide y enviaron la causa al juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, que tiene a su cargo el expediente contra funcionarios públicos por el desvío de los fondos en las Madres.

Con respecto a la actuación de Oyarbide sostienen que tuvo una “deficiente o incompleta descripción de la imputación” lo que “repercute directamente sobre los actos procesales subsiguientes que se registran en el sumario, pues impide verificar el respeto del principio de congruencia que exige una necesaria correlación entre el hecho narrado en la indagatoria y aquel contenido en el procesamiento”.

Los jueces explican que en las declaraciones indagatorias, “a pesar del minucioso análisis de la por demás extensa imputación que se incluyó en las actas que aquí examinamos -que insumió más de diez fojas-, nos hemos tropezado con serios obstáculos que nos han imposibilitado la adecuada comprensión de la plataforma fáctica que constituye el objeto de este sumario”, es decir, no se explica claramente qué es lo que se investiga.

Oyarbide “tampoco ha explicado las características del 'acuerdo' -extremo exigido por la figura de asociación ilícita- que habría vinculado a los diferentes sujetos que la habrían conformado”, consignan los jueces y agregan que “tampoco se ha precisado cuánto dinero habría recibido la Fundación, qué parte del mismo habría sido desviado ni se ha especificado cuál ha sido su destino final, sino que sólo se han descripto, genéricamente, diversas maniobras”.

Por todas estas “deficiencias” los jueces consideraron que “la información que de allí se desprende resulta palmariamente insuficiente” ya que “si bien conocemos las características generales de las diferentes modalidades que habrían utilizado los encausados, no hemos podido identificar cada una de las operaciones que configuraron un desvío de dinero”, explican los camaristas y sentencian “la verdad permanece oculta”.

“No se trata de un mero incumplimiento formal, sino que nos encontramos frente a un defecto de tal magnitud que ha impactado directamente sobre las garantías de raigambre constitucional de los encausados”, por lo que los camaristas decidieron declarar la nulidad de todo lo actuado por “la falta de racionalidad” de Oyarbide para llevar adelante la instrucción de la causa.

En mayo pasado la Unidad de Información Financiera (UIF) del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, a cargo de José Sbatella, había solicitado se revoque la falta de mérito en la "causa Schoklender" dictada por la misma sala de la Cámara Federal. También se habían pedido los procesamiento resueltos por el ahora apartado Oyarbide.

Oyarbide había identificado a Sergio Schoklender como jefe de una asociación ilícita y de apropiación indebida de recursos de la seguridad social y lo embargó por 200 millones de pesos.

Lo mismo hizo con Pablo Schoklender a quien procesó por los mismos cargos que su hermano, pero bajo el rol de organizador de la asociación ilícita lo que le implicó embargo por 150 millones pesos. Alejandro Gotkin, también considerado organizador, fue procesado por los artículos 210, 173 inciso 7° y 174 inciso 5° y embargado por 100 millones de pesos.