La dirección nacional de Comercio Interior había sancionado a la cadena de supermercados porque no exhibía los precios de cuatro productos en sus góndolas. El supermercado apeló, y la Cámara en lo Contencioso Administrativo confirmó la multa.
El supermercado Coto tendrá que pagar una multa de 40 mil pesos por exhibir de manera confusa y desordenada los productos y sus precios en las góndolas de uno de sus locales. La sanción había sido impuesta por la dirección nacional de Comercio Interior, pero el supermercado había apelado ante la justicia. La Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal confirmó ayer la multa, por una infracción a la Ley de Lealtad Comercial.
Comercio afirmó en la sanción administrativa que Coto “no cumplió con su deber de consignar el precio que debía abonar el consumidor con respecto a cuatro productos de los comercializados en uno de sus locales de Capital Federal”. En el fallo, los jueces ratificaron los hechos y le recordaron al supermercado que debe ser más diligente con la información sobre sus productos y sus precios.
“El potencial consumidor se encuentra en una situación desventajosa con respecto a la empresa, por lo que es correcto exigirle a aquella una mayor diligencia a la hora del control de la exhibición de sus precios, asegurándole al primero la posibilidad de informarse sin necesidad de recurrir a otros medios”, explicaron los jueces de la sala de feria de la Cámara.
Las autoridades de la cadena de supermercados aseguraron que las obleas con los precios habían sido desplazadas por los propios consumidores, y planteó que el personal de la empresa no pudo corregir de forma inmediata esa situación. Los jueces entendieron que esa omisión fue desleal y destacaron que la finalidad de la ley “es preservar la lealtad en las relaciones comerciales, de manera de evitar que se produzcan desvíos o captación potencial de clientela por medios contrarios a dicha lealtad”.
Los camaristas Marcelo Duffy, Rogelio Vincenti y Jorge Morán señalaron que la obligación de publicar el precio del producto “se enmarca dentro de un sistema global de normas, principios, instituciones e instrumentos de implementación que tienen por finalidad, por un lado, garantizar al consumidor una posición de equilibrio en sus relaciones con los proveedores de bienes y servicios”.