Fue en el marco de la reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Fernández de Kirchner también cuestionó a los miembros permanentes de ese Consejo y pidió "más respeto al derecho internacional". Denunció el "lobby de los fondos buitre ante el congreso americano luego del memorando de entendimiento con Irán".
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner reiteró ayer, durante su presentación en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el reclamo argentino por la soberanía sobre las islas Malvinas y cuestionó a los miembros permanentes del Consejo que no atienden la decisión de la Asamblea en pos del diálogo de Reino Unido y Argentina.
La primera mandataria indicó que "nadie se preocupa" porque "no hay ningún veto del Consejo de Seguridad, porque lo que pasa es que la Argentina no forma parte del Consejo de Seguridad ni de las naciones que deciden en el mundo". Y agregó que "nada se va a solucionar" mientras "valga más el voto de los cinco permanentes que están sentados en el Consejo de Seguridad, más que el voto de Costa de Marfil, Ghana o de Kenia, o de Egipto, o de Uganda, de Argentina o Emiratos Árabes".
De esta forma, subrayó que "necesitamos más respeto al derecho internacional, más igualdad de tratamiento entre los que estamos aquí sentados".
Cristina también se refirió al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al indicar: "escuché por parte de un mandatario, hoy por la mañana, hablar del uso de la fuerza para atentar contra la integridad territorial de un país".
"En épocas de buitres económicos y halcones de la guerra necesitamos más palomas de la paz, más respeto al derecho internacional y más igualdad de tratamiento entre los que estamos sentados en esta Asamblea para construir un mundo más seguro", contrapuso Cristina.
En otra parte de su intervención, Cristina Fernández de Kirchner denunció "el lobby de los fondos buitre ante el congreso americano" luego del memorando de entendimiento con Irán firmado en 2012, en pos de avanzar en la investigación del atentado a la AMIA.
"Ahora se encuentran los cancilleres de ambos países, Irán y Estados Unidos, cuando la Argentina recibió fuertes críticas a partir de la firma de ese convenio, en el que nos acusaron de acordar con iraníes", expresó la Presidenta en la ciudad de Nueva York, ante los integrantes del Consejo, después de participar en la Asamblea 69 de Naciones Unidas. "Nos enteramos con sorpresa pero no con disgusto", dijo aludiendo a los contactos entre Estados Unidos e Irán, y resaltó que "siempre es positivo el diálogo para alcanzar un entendimiento entre las partes".
En ese sentido, reclamó que "la forma en que se ha venido combatiendo al terrorismo" a nivel internacional "no es la adecuada", porque "cada vez hay más grupos y más violentos", y advirtió que "si el problema, en lugar de desaparecer o disminuir se agrava, algo no está andando bien".
"El mundo se va complicando cada vez más", apuntó la jefa de Estado y señaló que "el escenario del año pasado era Irán y su amenaza nuclear", pero en cambio ahora el peligro es el grupo Estado Islámico, del que "no sabemos quién les vende las armas y los ha entrenado".
Asimismo la Presidenta señaló que "hay que replantearse un montón de cosas sobre todo los que cuentan con más información. Mi país no produce armas, compra energía y no contamos con la información con la que cuentan las grandes potencias pero más allá de esa información deberían ver cuáles son los métodos más adecuados para combatir el terrorismo, porque hay que tener en cuenta una cuestión fundamental que es el respeto a los derechos humanos".
En ese marco, la Presidenta volvió a mencionar, como ya había hecho ante la Asamblea General, que ya ha denunciado en la Justicia Argentina una supuesta amenaza del ISIS sobre su persona.
"No creo mucho que el Isis (Estado Islámico) se ocupe de la presidenta de la República Argentina" dijo y detalló que los motivos de la amenaza son "mi amistad con el Papa Francisco" y "porque reconozco la existencia de dos estados, el de Israel y el de Palestina".
El discurso finalizó con un llamado especial a la necesidad de respetar los derechos humanos, ya que la Presidenta subrayó la experiencia argentina en esa materia al juzgar a los responsables de la dictadura cívico militar e indicó: "creemos que tenemos antecedentes suficientes para decir que la lucha se debe llevar a cabo en el marco de respeto a los derechos humanos".