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Sólo. Así pidió estar ante los jueces de la sala IV de la Cámara de Casación Penal, Eduardo Vázquez. Así fue. Pasados pocos minutos del mediodía, Mariano Borinsky, Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos estuvieron frente a frente con Vázquez. Lo habían citado para lo que se conoce como audiencia “de visu”, es decir, audiencia de conocimiento. 18 años es la condena que hoy cumple Vázquez y es la que deben revisar los jueces.

“Dejáme de romper las pelotas porque sino te agarro y te prendo fuego”, declaró uno de los testigos en el expediente. El 10 de febrero del 2010, después de una discusión, Vázquez le arrojó alcohol a Taddei y la prendió fuego con un encendedor. Sucedió en la casa donde vivían, en el barrio de Mataderos.

Vestido informalmente, de buzo blanco y jean, Vázquez les contó hoy a los jueces cómo vive en el penal en el que está preso. “Intimidad”, pidió el ex Callejeros. En base a ello se desarrolló la audiencia. No fueron más de 10 minutos: Vázquez les contó a los jueces que está trabajando en el complejo penitenciario y estudiando en la UBA –en la unidad que posee el complejo-. El músico, también condenado a 6 años de prisión por la tragedia de Cromañón, les dijo a los jueces: “Mi hija me sostiene”.

En las inmediaciones de la planta baja de Comodoro Py, donde se realizó la audiencia, acompañó a Vázquez el padre de Diego Argañaraz. El ex manager del grupo Callejeros se encuentra detenido en Ezeiza junto a Vázquez y Patricio Fontanet, todos condenados por la tragedia de Cromañón.

La defensa de Vázquez cuestiona que “no está probada la intención de matar”. Uno de sus argumentos es: “Quien quiere matar mata, no la arropa y la lleva al hospital”, tal como sostiene el baterista en su versión de los hechos, que fue rechazada por los magistrados del TOC N° 20.

La querella y la fiscalía solicitan que se modifique la sentencia y se elimine el atenuando de “emoción violenta”, consignado en el fallo por los magistrados del tribunal para condenar a 18 años a Vázquez. La querella argumenta que la calificación de “homicidio calificado por el vínculo” debe agravarse a "con alevosía”. La fiscalía sólo lo hace a partir del “homicidio calificado por el vínculo” y considera que se trata de un caso típico de violencia contra la mujer o violencia de género. Ambos pidieron prisión perpetua.

Ahora los integrantes de la sala IV de la Cámara de Casación tienen en sus manos los recursos presentados contra la sentencia que condenó a Vázquez a 18 años de prisión. Todo está listo para definir.