Infojus Noticias

Patricio Santos Fontanet estaba triste y desesperanzado. No aceptaba visitas en el penal. En 2012  fue trasladado de una clínica psiquiátrica de Córdoba hacia la cárcel federal de Ezeiza para seguir cumpliendo la sentencia de 7 años de prisión por la tragedia de Cromañón. Cuando llegó no quería cantar ni tocar la guitarra.  El “Pato”, como lo conocen sus fans de la ex banda “Callejeros”, estaba ensimismado y con poco ánimo. Menos de un año después, tras un arduo proceso de musicoterapia, el cantante y compositor anunció lo que nadie se atrevió a imaginar. Desde el penal y junto a otros músicos de su nueva banda “Casi Justicia Social” (CJS), grabó un disco con 14 canciones.

La noticia fue comunicada por su mujer Estefanía Miguel, quien publicó en su muro de Facebook: “Estoy contenta. Voy a ver a mi hombre, mi compañero, mi elegido, el papá de mi hijo, del cual estoy muy orgullosa. En el llamado de hoy, me adelantó que tienen terminada toda la primera fase de lo que será su próximo disco. Son 14 canciones trabajadas por todos los integrantes del grupo, con el cual decidió realizar su proyecto de vida.”.

En diálogo con Infojus Noticias, Jessica Muniello, coordinadora del Dispositivo de Tratamiento del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (PRISMA), confirmó que Fontanet grabó el disco en el penal a través de actividades del programa y con visitas especiales.  “Autorizamos las visitas en el contexto de una estrategia terapéutica. Armamos visitas intermódulos para que se encontrara con el bajista Christian Torrejón, que está detenido en otro módulo de la cárcel de Ezeza, y luego habilitamos a que se armara una especie de sala de grabación para que se junten con los otros músicos que venía de afuera”, dijo Muniello.

El grupo de Casi Justicia  Social está compuesto por Patricio “Pato” Fontanet en voz, Christian “Dios” Torrejón en bajo, Ariel “Crispín” Pedrello guitarra, Luis “Lulú” Lamas batería y Álvaro “Pedi” Puentes en guitarra y coros. Esta grabación sería el primer disco de la banda.

La coordinadora dijo que el ex músico de Callejeros –banda que se disolvió a fines de 2010- pasó por un proceso personal que tuvo etapas difíciles. “Pato llegó destruido a la cárcel. Con el correr de los días fue tomando contacto con el espacio de musicoterapia. La profesora terapeuta cantaba canciones y él la acompañaba con la guitarra. Es un espacio individual que apunta a un trabajo sobre la subjetividad de cada interno. Para Pato la música es como el aire, así como para otro puede resultar un libro, una máquina de cortar el pelo o una amasadora”, explicó quien dirige el PRISMA, un programa que nació en julio de 2011 y que se encarga de contemplar la atención y tratamiento de las problemáticas en salud mental de aquellas mujeres y hombres alojados en la cárcel bonaerense de Ezeiza.

PRISMA dispone de tres dispositivos: evaluación, tratamiento y egreso. Estas acciones están a cargo de un grupo de interdisciplinario de 60 profesionales entre trabajadores sociales, psicólogos, psiquiatras, musicoterapeutas, profesores de gimnasia y administrativos. Además de los talleristas externos que trabajan habilidades sociales, lectura y fotografía, entre otras actividades.

“Estimulamos que Pato se reencontrara con la guitarra, luego le llevamos un cuaderno y empezó a escribir canciones. Fuimos trabajando junto a él en diferentes estrategias terapéuticas pero nunca hubiéramos imaginado que todo terminaría en la grabación de un nuevo disco. Él es un tipo profundo, con muchos recursos intelectuales. No sé si podrá tocar de nuevo ante el público, pero es un puntapié que lo conecta a la realidad desde lo que más le gusta hacer y eso es muy positivo”, enfatizó Muniello.

Familiares y amigos de Fontanet tienen la expectativa que el cantante recupere la libertad a principios de febrero. Mientras tanto, su mujer escribió en su Facebook: “Agradezco la predisposición del servicio penitenciario, y la vocación que el programa PRISMA ha ido mostrando para la mejoría integral de Patricio. Han sido y son, un engranaje fundamental para que este proceso, sea, cuanto menos, más llevadero.”

La causa por la tragedia de Cromañón, la mayor de la historia del rock argentino en la que murieron 194 personas,  tuvo su primera sentencia el 19 de agosto del 2009, siendo los músicos del grupo absueltos. Sin embargo, el fallo se revisó y el 20 de abril de 2011 la Cámara de Casación dictaminó que todos los miembros de la banda cumplirían sentencia efectiva en la cárcel. De esa manera, el 17 de octubre de 2012 la condena  fue la siguiente: 7 años de prisión a Patricio Rogelio Santos Fontanet, a 6 años al baterista Eduardo Arturo Vázquez, a 5 años a los restantes músicos de la banda, Christian Eleazar Torrejón, Juan Alberto Carbone, Maximiliano Djerfy y Elio Rodrigo Delgado,  y a 3 años  al escenógrafo del grupo, Daniel Horacio Cardell.