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Le molestaban los perros de su vecino: los ladridos, los ruidos, la suciedad de los animales. Hasta que un día dijo basta: él, que es médico psiquiatra, pasó al acto criminal y asesinó a tiros a su vecino canillita, identificado como Sergio Beltrán, de 60 años. Fue tras una fuerte discusión en la que también participaron sus esposas, en un barrio de Vicente López, a metros de la cancha de Platense. El presunto asesino se llama Oscar Hernández, tendría entre 55 y 60 años, y se entregó acompañado por su abogado, luego de estar varias horas prófugo.

El hecho ocurrió cerca de las 9 de esta mañana en la calle Zufriategui al 1700. Según reconstruyó, a partir de testigos, el comisario Claudio Blanco, jefe de la Departamental Conurbano Norte, los vecinos tenían una mala relación. Todo habría estallado cuando las mujeres de ambos discutieron por un problema entre sus perros. Entonces, al borde de la violencia, acudieron a sus respectivos cónyuges para que las defendieran. "Beltrán, incluso, dejó el puesto de diarios en el que trabajaba y regresó a su casa para ver qué había sucedido con su mujer y ahí fue cuando se encontró con su vecino y comenzó una pelea entre ellos", explicó el comisario.  Ambos –víctima y victimario- vivían en una misma propiedad: uno, en planta baja, y otro, en planta alta.

Al encontrarse en la puerta del edificio, según lo que relataron los testigos, el médico extrajo un revólver y disparó entre tres y cuatro veces contra su vecino, que cayó gravemente herido. Tras cometer el crimen, el profesional escapó y comenzó a ser buscado por la Policía, que al mediodía logró demorar a su mujer por el hecho. Antes,  Hernández había escapado a bordo de su Suzuki Fun, auto que más tarde secuestraron cerca de su casa. En tanto, el herido fue trasladado al hospital de Vicente López, donde murió a raíz de las graves lesiones sufridas en el pecho.

Pero no todo terminó allí. Los investigaron encontraron un pequeño arsenal de armas en el hogar del médico.  Por orden del fiscal de Vicente López, Alejandro Guevara, policías de la seccional segunda  realizaron un allanamiento en su domicilio, donde hallaron siete armas de fuego, entre ellas un revólver 32 y un 38, varias de las cuales no cuentan con los permisos de tenencia correspondientes.

En las próximas horas, los peritos analizarán las mismas con el fin de establecer si alguna fue la empleada en el crimen. Se sospecha que fue cometido con un revólver, porque no se hallaron vainas en el lugar del ataque. Según precisaron fuentes judiciales a Infojus Noticias, el hecho estaría esclarecido y se espera la confesión de Hernández, que declararía ante el fiscal en las próximas horas. El médico sería procesado por homicidio. Además, se buscaría determinar la responsabilidad de su mujer en la participación del hecho.