Uno de ellos, en una entrevista periodística, describió cómo fue la cadena de mandos que ordenó la represión. Hoy lo hará ante el Tribunal. También declarará el chofer de uno de los cuatro imputados.
En el juicio por la represión que en 2001 marcó el fin del gobierno de Fernando de la Rúa, fueron citados a declarar como testigos los integrantes de la Policía Federal a cargo del operativo que empezó la represión. Las querellas tienen expectativas porque uno de los testigos declara por primera vez en la causa y puede dar claves sobre quién y cómo se dio la orden de desalojar a los manifestantes de la Plaza de Mayo, que dejó un saldo de cientos de heridos y cinco muertos en las calles del centro porteño.
Otro de los ex policías citados para la audiencia de hoy, en 2001, entrevistado por Georgina Barbarrosa, describió la cadena de mandos y señaló como parte de la decisión de reprimir a las autoridades del Ministerio del Interior, entre quienes estaba el entonces secretario de Seguridad, Enrique Mathov. En este juicio Mathov es el único político acusado de manera indirecta por el homicidio (culposo) de los manifestantes.
Al ex funcionario de la Alianza se suman como imputados por los mismos cargos el ex jefe de la Federal, Rubén Santos, y sus subordinados: los ex comisarios Raúl Andreozzi, entonces superintendente de Seguridad Metropolitana, y el ex director general de Operaciones, Norberto Gaudiero. Como Mathov, también están imputados además por abuso de autoridad y por incumplir con sus deberes como funcionarios públicos al no haber actuado para impedir los asesinatos de Gustavo Benedetto, Alberto Márquez, Gastón Riva, Carlos Almirón y Diego Lamagna.
Entre los testigos convocados para hoy por el Tribunal Oral Federal 6 está el hombre que durante esa jornada se ocupó de trasladar a Gaudiero como chofer; se espera que pueda dar precisiones sobre las indicaciones dadas y recibidas por su entonces jefe.
Este es el primer juicio en el que autoridades políticas -democráticamente elegidas- deberán responder por las muertes que ocasionaron las fuerzas de seguridad a su mando. De los más de 500 testigos citados ante los jueces -José Martínez Sobrino como presidente del tribunal, Javier Anzoátegui, Rodrigo Giménez Uriburu y Adrián Martín (como juez sustituto)- los ex jefes de la Federal son los que están en condiciones de relatar cómo se gestó la represión y el papel que tuvieron las autoridades en estos hechos.