El juez Ariel Lijo elevó a juicio oral la causa por la búsqueda del joven, quien fue encontrado dos días después del choque en Once. Se investiga el presunto incumplimiento el Plan de Acción Coordinada ante Situaciones de Emergencia de la Policía Federal Argentina. Por el día del trabajador judicial, recién mañana se conocerá el tribunal a cargo del proceso.
El juez federal Ariel Lijo elevó a juicio oral la causa por la búsqueda de Lucas Menghini Rey durante la tragedia de Once y envió a juicio a tres bomberos de la Policía Federal. En la causa se investiga el presunto incumplimiento del Plan de Acción Coordinada ante Situaciones de Emergencia de la Policía Federal Argentina.
Quienes irán a juicio oral son el director general de Explosivos e Investigaciones Periciales, Carlos Alberto Medina; el jefe del departamento Zona III, Omar Alberto Vacca; y el de la división cuartel IV Recoleta, Raúl Héctor Abuin. Mañana recién se sorteará el tribunal que tendrá a su cargo la realización del juicio, debido a que hoy es feriado en la justicia por el día del trabajador judicial.
60 horas para encontrar a Lucas
Dos días después del choque, a Lucas lo seguían buscando. Ese 24 de febrero, a las 15 horas en la estación de San Antonio de Padua, la hermana y la tía lo reconocieron en las imágenes de las cámaras de seguridad. Lucas había subido a las 7. 38 de la mañana del 22 de febrero al cuarto vagón del tren que, minutos después, chocaría en Once.
Fue entonces que volvieron a buscar a Lucas entre los hierros retorcidos que habían sido trasladados a Retiro. Los perros marcaron la unión entre los vagones números 1040 y 2108. Ese día, habían empezado a sentirse “olores cadavéricos”. A las 18.30, encontraron el cuerpo del chico de 20 años.
Llevaba una remera blanca y un pullover gris y verde, y estaba en la cabina auxiliar del conductor, ubicada en el cuarto vagón que, con el choque, había quedado reducida a 30 centímetros. Horas más tarde, la letra fría de la autopsia diría que murió de “politraumatismos” y “compresión toracoabdominal”.
La causa judicial
En un primer momento, la causa que empezó por la tardanza en encontrar a Lucas estuvo en manos del juez Federal Claudio Bonadio. El fiscal de la causa, Federico Delgado, había recusado al juez advirtiendo que el mismo Bonadio estaba involucrado. “Hay discordancias claras y concretas que pueden afectar el buen orden del proceso”, expuso Delgado. El pedido fue rechazado por la Cámara Federal, en mayo de 2012, por el “incipiente estado procesal” en que se encontraba. Después, la sala apartó al magistrado y el expediente quedó a cargo de Lijo.
Es que Bonadio había estado en la estación Retiro 28 horas después del accidente y mientras el cuerpo de Lucas aún se encontraba entre los hierros. Un acta policial detalla cómo el juez, junto con su secretario, llegó al lugar para hacer una inspección in situ. Los bomberos le ofrecieron instalar una sonda para “encontrar restos cadavéricos” pero el juez lo rechazó y pidió que “no se modifique la escena hasta que no se hicieran las pericias de rigor”.
Lijo avanzó y, en diciembre de 2013, procesó a siete bomberos. Tres de esos procesamientos fueron revocados en agosto de 2014; mientras que se mantuvieron los procesos de Medina, Vacca y Abuin, junto con el de Leonardo Day, quien moriría a principios de 2014 en el incendio del depósito de la empresa Iron Mountain.
Morir procesado
Day era jefe de Departamento Zona I de la Superintendencia Federal Bomberos de la PFA. Con 33 años como bombero estuvo en las tragedias de Lapa y en Once. En febrero del año pasado, se subió a la autobomba de la unidad 102 para ir hacia un incendio que se originó en un depósito de Barracas, de la empresa Iron Moutain.
Ese día, cedió una pared y cayó sobre un grupo de bomberos: allí murió Day. “Lo conocía hace 30 años, lo venía escuchando y de golpe dejé de escucharlo”, dijo el Jefe de División central de alarmas de la PFA, Jorge Laurens. Day fue imputado por presuntamente “no haber cumplido adecuadamente su función toda vez que el cuerpo sin vida de Lucas Menghini Rey fue hallado dentro del tren”.
En una entrevista radial, Mabel Day, esposa de Leonardo, explicó el trabajo de los bomberos y dijo: “Ellos tienen que cumplir órdenes”. “Fueron, sacaron a las víctimas y el juez dijo que se suspendía la búsqueda porque no había más gente para buscar en el tren”. Y aclaró: “Los bomberos sabían que no se había encontrado a todos los desaparecidos”.
GA/LL