Infojus Noticias

Tomás Méndez es periodista y conductor de televisión. Su programa ADN emitido  por Canal 10 fue fundamental es el destape del escándalo de los narcopolicías cordobeses que derivó en la renuncia del jefe de Policía y del ministro de Seguridad de Córdoba.

En el programa de Méndez habló por primera vez Juan “El Francés” Viarnes, el testigo arrepentido que le contó al juez Ricardo Bustos Fierro cómo la policía de Córdoba armaba causas y negociaba con narcotraficantes. La investigación judicial avanzó en secreto hasta que el 4 de septiembre Viarnes contó su denuncia en el programa de Méndez y mostró videos tomados con cámaras ocultas. Al día siguiente del programa,  el jefe la División de Lucha contra el Narcotráfico, comisario mayor Rafael Sosa, y dos de sus subordinados, fueron apartados de sus cargos. En los días posteriores, Sosa fue detenido y renunciaron el jefe de Policía y el ministro de Seguridad de la provincia.

Ayer cerca de las 19.30 una persona conocida del periodista escuchó una conversación en el barrio Villa Libertador. En esa charla, un hombre comentó que se estaban ofreciendo 300 mil pesos por “darlo vuelta” a Méndez. “Darlo vuelta” en la jerga narco es sinónimo de asesinato. Esta mañana el periodista presentó una denuncia en la fiscalía a cargo de Enrique Senestrari quien lleva adelante toda la investigación sobre los presuntos delitos que involucran a policías cordobeses y narcotraficantes.

Según relató Méndez a Infojus Noticias, se espera que en el curso de la tarde, el fiscal le tome declaración al testigo que escuchó que alguien estaría ofreciendo dinero por el asesinato.

Mientras tanto la investigación judicial sobre la trama protagonizada por policías y narcos no se detiene. Ayer hubo nuevos allanamientos en el edificio de la Central de Policía Provincial.

Al mismo tiempo, también hubo novedades en la causa por la muerte de Juan Alós. Alós, de 34 años, era uno de los policías investigados por su presunta vinculación con el narcotráfico. Apareció muerto adentro de su auto, con un disparo en la cabeza. El hecho fue tomado como un suicidio por el fiscal  Emilio Drazile. Ayer el abogado de la viuda de Alós, Carlos Nayi, sumó a la causa el testimonio de un policía que asegura que el auto de Alós fue lavado por otros policías esa misma noche. "En una dependencia policial fue virtualmente lavado, limpiando las pruebas que existían en el interior", declaró Nayi a medios locales.