Por el caso hay un detenido que, tras auto infringirse heridas con un hierro, manifestó que la muerte se produjo “por un accidente y que preso de la desesperación lo seccionó para poder deshacerse de él”, explicó a Infojus Noticias una fuente judicial.
Antes que el cuerpo apareció el presunto asesino. Así podría resumirse el caso del comerciante rosarino, Néstor Smud, cuyo cuerpo descuartizado fue encontrado ayer al costado de la autopista Rosario-Santa Fe. El detenido tiene 54 años y, en sede policial, tras auto infringirse heridas con un hierro, manifestó que la muerte se produjo “por un accidente y que preso de la desesperación lo seccionó para poder deshacerse de él”, explicó a Infojus Noticias una fuente judicial. Mañana, si su estado físico se lo permite, podría prestar declaración indagatoria frente al fiscal de Investigación y Juicio, Guillermo Apanowicz.
El caso comenzó como un secuestro, 21 días atrás. El lunes 7 de julio la esposa de Smud, un comerciante de 69 años, lo llamó a su teléfono celular. En lugar de su marido, la atendió un hombre que le dijo que su esposo “había tomado el remis equivocado y le cortó”, relató la misma fuente a esta agencia. Luego ese mismo hombre llamó a la casa de los Smud, propietarios de un negocio de bijouterie y accesorios en una galería del centro rosarino, y les pidió 20 mil pesos para liberarlo. La familia hizo la denuncia policial.
“Los llamados no se repitieron y se comenzó a trabajar en la intervención y el entrecruzamiento de teléfonos e información. A raíz de eso, se llegó a la persona que está detenida, que fue con la última que Smud intercambió mensajes y comunicaciones. Así fue como el viernes 25 se llegó a su domicilio”, detalló la fuente. El hombre identificado por sus iniciales E.R, hasta que preste declaración indagatoria, trabajó hasta hace unos meses como taxista y vivía solo en un departamento de la calle Salta, cerca del tradicional boulevard Oroño.
Tras el allanamiento en su casa, en el que se encontraron elementos claves para la investigación, el hombre fue llevado a una dependencia policial y la mañana del sábado “se auto infringió heridas en las muñecas con un hierro de la cama de la celda, como una forma de quitarse la vida. Y ahí, en medio de una crisis de nervios manifestó la autoría del hecho. Ahí contó que en medio de una discusión con Smud, lo empujó y él pegó contra la bacha del baño y que ahí falleció”, detalló la fuente judicial. Para la justicia es clave la diferencia entre que el hombre “manifestó” la autoría del hecho y no la “confesó” ya que no estaba en indagatoria o ante un representante de la justicia.
El cadáver
Cuando contó lo que había sucedido, el hombre también agregó que tuvo el cadáver de Smud entre 3 y 4 días en su casa y que “cuando comenzó a despedir olor fue que decidió seccionarlo y deshacerse de él”, amplió la fuente. En su relato, el hombre nombró al kilómetro 6 de la autopista Rosario- Santa Fe (a la altura de la zona ubicada entre Capitán Bermúdez y Granadero Baigorria) como el lugar donde se deshizo de las bolsas con las partes del cuerpo de Smud.
Cuando la policía llegó hasta allí encontraron el peor escenario posible: en 7 bolsas de consorcio estaba el cuerpo seccionado.
Al enterarse de que el detenido se había lastimado, Apanowicz se presentó en la sede policial y ahora debe esperar que estén dadas las condiciones médicas para poder indagarlo, algo que podría suceder mañana.
“Si algo quedó claro con todo lo que pasó es que nunca hubo un secuestro sino un aprovechamiento del momento o que el pedido de dinero fue como una forma de despistar”, explicó la misma fuente.
Lo que todavía no está claro para los investigadores es qué tipo de relación unía a ambos, aunque sí está probado que se conocían aunque “parecería que era un vínculo de corta data”. También tienen probado que Smud fue hasta la casa del detenido por propia voluntad, “como se desprende de los mensajes que se enviaron ese día”.
La semana pasada la desesperación hizo que los familiares y amigos de Smud dieran a conocer su caso a través de las redes sociales, en busca de obtener datos para poder ubicarlo. Algo similar hizo la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia de Santa Fe, que difundió su imagen y descripción. Los esfuerzos fueron en vano. Aunque todavía restan los resultados finales de la autopsia y algunos peritajes en la escena del crimen, los investigadores tienen una certeza: Smud murió el mismo día en que desapareció.