Infojus Noticias

La investigación sobre el crimen de Melina Romero, al joven de 17 años que apareció asesinada el 23 de septiembre pasado, sumó hoy dos novedades: liberaron a uno de los cuatro detenidos y detuvieron al pai César Sánchez, quien profesa la religión umbanda. Ambas medidas fueron pedidas por la fiscal de la causa, María Fernanda Billone, quien además pedirá la “prisión preventiva de los otros tres” detenidos, según indicó a Infojus Noticias una fuente de la investigación. El allanamiento de la casa y la detención del religioso fueron ordenadas a partir del testimonio de la “testigo clave” del caso que mencionó al pai César como el dueño del lugar donde habrían violado a Melina. 

“Esa noche estuve en el templo. Estuve acá. Acá los chicos se quedan porque estábamos preparando flores. Nosotros adornamos el templo cuando tenemos alguna fiesta. Los chicos se quedan. Tengo a Mauro prácticamente viviendo acá. Esto es una familia”, dijo el pai César durante una conferencia de prensa que improvisó en su casa, donde funciona también el templo, en Italia 625, en la localidad bonaerense de Don Torcuato, cuando circuló la información de que se iba a librar una orden de detención sobre él. Allí estuvo acompañado por su abogado, Roberto Damboriana. Poco después de la rueda de prensa llegaron los uniformados que revisaron la casa y lo detuvieron.

Melina salió de su casa la noche del 23 de agosto a festejar sus 17 años en el boliche ‘Chankanab’ de San Martín. Las cámaras de seguridad registraron que llegó a las 23.24 y salió a las 6.46 del domingo acompañada de tres o cuatro hombres. Un mes después de la desaparición dos mujeres encontraron su cuerpo en una bolsa de residuos y envuelto en una frazada. Estaba a la vera del arroyo José León Suárez, un desprendimiento del Río Reconquista. La autopsia no pudo determinan con exactitud cómo murió la chica y si hubo un ataque sexual previo.

“Si Melody hubiese estado acá nunca se le hubiese pasado por alto nombrar el cristo que hay en la puerta”, dijo el pai César, en esa rueda de prensa, y sostuvo que no conocía a ninguno de los acusados del crimen. Agregó: “Yo les agradezco siempre a ustedes. Yo siempre estuve del lado de ustedes porque me abrieron los canales para que yo hable de la religión”. 

Esta mañana, la fiscal Billone ordenó la liberación de Javier “El Pelado” Rodríguez, de 44 años, después de pasar 27 días detenido pero “sigue sometido a proceso”. La fuente consultada precisó que “no había mérito suficiente para dictarle la prisión preventiva y que siguiera privado de su libertad”. Por eso, el juez de Garantías, Mariano Porto, aceptó el pedido de la fiscal.

Por el caso quedan tres detenidos: un adolescente de 16 años y otros dos  mayores de edad, Joel “Chavito” Fernández, de 20 años y el “Narigón” Elías Fernández, de 18. Están acusados de homicidio doblemente agravado por violencia de género y la participación de dos o más personas. Además, la Justicia busca a otros dos sospechosos: el conductor del auto al que se habría subido Melina a la salida del boliche y un hombre que estuvo en la casa de Pablo Podesta.

Respecto de Chavito, Narigón, y el menor conocido como T., la fiscal trabaja para pedir las prisiones preventivas. “Podría ser que las pida entre hoy y mañana”, detalló la fuente consultada. Los pedidos de los dos mayores serán presentados en el juzgado de Porto y el del menor, en el de la jueza de Garantías del joven, a cargo de María Eugenia Arbeletche.

En tanto, el abogado de Fernández dijo que "se investiga la asfixia" como posible causa de la muerte de Melina, aunque todavía restan realizar más estudios complementarios, lo cual coincide con la declaración de la "testigo clave" que dijo que le colocaron una bolsa en la cabeza cuando todavía respiraba. También señaló que se estima que la data de muerte de la joven es "de dos a tres semanas" aunque no está claro si se cuenta desde el 23 de septiembre, cuando se encontró el cuerpo, o del 27, cuando se efectuó la operación de autopsia.

Por qué estuvo detenido Rodríguez

Rodríguez, quien fue liberado hoy, había sido detenido en su casa del barrio Río Tercero, en Pablo Podestá. Desde entonces en los relatos periodísticos fue identificado como “El Pelado”, pero en el expediente judicial ni si quiera figura ese apodo. A Rodríguez, le dicen “El Abuelo”. Tampoco es el tío de ninguno de los detenidos en la causa como trascendió mediáticamente. Según su declaración ante la fiscal Billone y otros operadores judiciales-a la que tuvo acceso exclusivo Infojus Noticias- no tiene ningún sobrino varón.

La testigo principal, M., nunca lo nombró en su declaración y no hay otros elementos que lo involucren. El único testimonio que apunta contra Javier Rodríguez es el de Joel Emanuel Fernández, alias “Chavito” pero esa declaración está viciada de irregularidades.

El joven de 20 años declaró tras su detención el 12 de septiembre en la comisaría de El Palomar. Según la versión policial, “Chavito” se quebró y confesó el crimen. Pero la defensa del joven denunció que habló bajo torturas y amenazas.