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En el último día hábil antes que comience la feria judicial el juez federal Fernando Poviña puede definir los pedidos de excarcelación presentados por María Jesús Rivero y su exesposo Rubén la “Chancha” Ale. Está detenidos mientras son investigados en una causa de lavado de dinero proveniente de una red de trata de personas que operaría desde 2002 en las provincias de La Rioja y Tucumán.

Rivero está detenida desde el pasado lunes 23 de diciembre. La orden de detención también involucra a su actual pareja, Oscar Roberto Dilascio, pero cuando los efectivos de gendarmería lo fueron a buscar a la casa que comparte con Rivero, en el pasaje Santa Cruz, en la localidad tucumana de Yerba Buena, Dilascio no estaba.

El juez que consideró que el clan que integran, junto a Ale y otros 10 procesados, “ha demostrado capacidad organizativa” y la tenencia de armas y recursos suficientes, como para eludir la acción de la justicia o entorpecer la investigación, ahora deberá resolver los pedidos de excarcelación presentados ese mismo lunes por los abogados de los acusados. Desde el pasado lunes Rivero estuvo alojada en el “Escuadrón 55” de Gendarmería Nacional y, ante la falta de cupos en la provincia, hoy fue trasladada a una unidad de Gendarmería en Güemes, Salta.  Carlos Varela Soria, el  abogado que asiste a Rivero estimó que a última hora del día de hoy el juez puede resolver si da lugar o no al pedido de excarcelación.

Alejandro Biagosch, el abogado de Rubén Ale, precisó a Infojus Noticias que para su cliente, además del pedido de excarcelación,  presentó un hábeas corpus preventivo aludiendo a su estado de salud. “La presentación la hicimos el mismo lunes 23, el mismo día en el que Ale quedó internado”, precisó el abogado. Y agregó que el Juzgado Federal N° 2 de Tucumán, a cargo de Poviña, estará de turno durante la feria.

Señalado por Susana Trimarco, la madre de Marita Verón, como responsable del secuestro y desaparición de su hija, el mismo día que Poviña libró la orden de detención Ale se internó en el Sanatorio Modelo de Tucumán. Allí quedó en calidad de detenido, con guardia de gendarmería. Biagosch dijo que presenta un “cuadro de hipertensión arterial, mal de Parkinson y obesidad mórbida”, entre otras afecciones.

En esta causa Ale fue el primero en sentarse frente al juez. Se presentó como remisero y titular desde 1995 de Cinco Estrella, la flota de remises que se sospecha era usada para trasladar a las mujeres captadas y obligadas a ejercer la prostitución. Además de “una pantalla adecuada para ingresar al circuito legal dinero proveniente de la actividad criminal”. Ale reconoció ser el dueño de la empresa y de haberla trasferido a su hijo Ángel Adolfo Ale y su actual pareja, María Florencia Cuño. Cuando le preguntaron por los “elementos” relacionados con la causa de Marita encontrados en la remisería- durante las allanamientos realizados en el mes de marzo- apeló a la falta de memoria. “Dijo que no recordaba cómo habían llegado allí, y después agregó que quizás fue Rivero -su ex pareja- quien los llevó”, contaron fuentes judiciales. A ella durante la indagatoria se refirió como “la señora Jesús”. Ahora, el juez Poviña debe resolver si durante la instrucción de la causa estarán en libertad, o si confirma la medida de prisión preventiva.