En una oficina reacondicionada con camas, los detenidos tenían televisores LED, heladera, aire acondicionado y teléfonos celulares. Los jefes policiales fueron separados de sus cargos y se abrió una investigación penal.
La puerta de la oficina de la seccional 27° de Arroyo Seco, ubicada unos 25 kilómetros al sur de Rosario, se había convertido en una celda vip: sólo se abría desde adentro. Si algún policía quería entrar, debía pedirles permiso a los tres detenidos que estaban en su interior rodeados de confort. Esto fue comprobado ayer por funcionarios de la Secretaría de Control de las Fuerzas de Seguridad de la provincia de Santa Fe. “Fueron a hacer una visita de sorpresa para inspeccionar el lugar y se encontraron con esta situación”, explicó a Infojus Noticias Sebastián Carranza, vocero de la fiscalía general de Rosario.
El lugar tenía aire acondicionado, heladera propia, televisión y teléfonos celulares, Diego “Panadero” Ochoa, Ochoa, Mauro Quebertoque, y un tercer hombre cuya identidad no trascendió. Ochoa es el ex jefe de la barra brava de Newell’s Old Boys, imputado por los asesinatos de Roberto “Pimpi Camino” y Maximiliano "Quemadito” Rodríguez, en medio de las internas de la barrabrava leprosa. Quebetorque es hijo de un policía y está acusado por otro homicidio, ocurrido en 2013.
Luego de comprobar lo que pasaba ahí, los funcionarios labraron las actuaciones correspondientes y dieron intervención a la fiscalía de Flagrancias que está siendo subrogada durante la feria por Guillermo Apanowicz, titular de la unidad de Investigación y Juicio. "Si comparamos con las condiciones de detención del resto de los presos podría decirse que hay diferencias en el trato", indicó el fiscal Apanowicz, que aclaró que aún no se determinó si los detenidos pagaban por sus privilegios.
El titular de la comisaría, Cristian Moya, y el jefe de Inspección de Zona, Daniel Villasboa, fueron separados de sus cargos acusados de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, pero en las próximas horas Apanowicz podría evaluar otro tipo de imputación, explicó Carranza. “Dependerá de lo que encuentre en el lugar y otros elementos”, dijo. El delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público” sólo prevé la multa económica, que puede oscilar entre los 3000 y 12000 pesos.
Un hecho similar al ocurrido en la seccional de Arroyo Seco fue descubierto en la comisaría 3ra. de la ciudad de Santa Fe, donde en poder de varios de los detenidos hallaron televisores, aires acondicionados, celulares, equipos de audio y hasta una ruleta. Esta investigación había comenzado a partir de una denuncia por una presunta fuga pero al indagar sobre lo ocurrido se descubrieron los beneficios "VIP".
Entre los 20 presos que gozaban de estos privilegios se encontraban ellos Daniel "El Tuerto" Mendoza y Alejandro "Aguja" Agüero, detenidos por narcotráfico. Por lo sucedido en la seccional 3ra. tres efectivos policiales fueron pasados a disponibilidad y otros siete fueron sumariados.