Desde hace 9 años, miles de jóvenes participan de la marcha de la gorra. Piden por la derogación del Código de Faltas, la ley que utiliza la Policía para detener a un joven cada 7 minutos. Ese día, los pibes de los barrios marginados, que no pueden caminar tranquilos porque la Policía los hostiga, pueden bajan al centro a reclamar con alegría. Los datos de una provincia que aumenta su seguridad pero no es más segura.
WC/AF