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Mauro Bongiovanni, el único detenido y acusado del crimen de su ex esposa, María Eugenia Lanzetti, la maestra jardinera asesinada a puñaladas el miércoles pasado en una guardería de la ciudad cordobesa de San Francisco, se negó hoy a declarar ante la Justicia que dispuso que siga preso. El abogado Felipe Trucco, defensor del imputado, explicó a la agencia Télam que esta mañana se realizó una audiencia de control de detención ante el juez de esa ciudad del este de Córdoba, Guillermo Rabino, y en la que el fiscal de la causa, Bernardo Alberione, pidió que el sospechoso continúe alojado en una cárcel común.

El letrado señaló que él no se opuso a la medida pero que solicitó que los peritos psicológicos y psiquiátrico del Servicio Penitenciario cordobés dictamine si existen riesgos de que Bongiovanni (45) se autolesione y en ese caso que sea derivado de la prisión de San Francisco a un centro piscoasistencial de la capital provincial. Además, el acusado se negó a declarar en su indagatoria ante el fiscal Alberione, quien le imputa el delito de "homicidio calificado por el vínculo" y dijo hoy que espera que "el caso se resuelva lo más rápido posible".

Los cinco niños, de entre un año y medio y tres, que presenciaron el crimen de su maestra mientras estaban en clase en el jardín "Estrellitas Traviesas" son asistidos por personal del Programa Provincial de Asistencia de Víctimas con Daños Colaterales. El comisario mayor Raúl Araya, jefe de la Departamental San Justo, indicó que se designó una psicóloga especializada para atender a los niños y sus familias. "Se hizo un relevamiento de los menores afectados y la profesional está llevando a cabo un seguimiento de cada caso para contener a los pequeños y a sus familias y darles el abordaje que necesitan", explicó el jefe policial.

Mientras que esta mañana reabrió sus puertas el centro vecinal donde funciona el jardín de infantes donde ocurrió el homicidio de la maestra. "A esta altura de la tecnología es necesario definir bien quién es un psicópata", expresó a la prensa Omildo Lanzetti, padre de la víctima, y agregó que "habría que buscar al psiquiatra que hizo el informe donde decía que Bongiovanni no iba a hacer daño a nadie".

El hecho ocurrió aproximadamente a las 11 del miércoles de la semana pasada, cuando Lanzetti (44) se encontraba en la guardería del centro vecinal Barrio Jardín de San Francisco y fue atacada por un hombre que le aplicó seis puñaladas que le provocaron la muerte.

Media hora después, Bongiovanni fue detenido como supuesto autor del crimen de su ex esposa y los investigadores determinaron que la mujer ya había presentado varias denuncias por violencia de género en contra del sospechoso. De hecho, Lanzetti contaba desde septiembre de 2014 con un botón antipánico pero al momento de ser atacada no alcanzó a accionarlo.

Télam/RA